La coreana Samsung suspendió temporalmente la producción del Galaxy Note 7 para mejorar las medidas de seguridad.
"Estamos temporalmente ajustando el programa de producción del Galaxy Note 7 con el fin de tomar medidas adicionales para garantizar materias de calidad y seguridad", informó la empresa en un comunicado.
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El anuncio es el último de una serie de problemas para Samsung sobre el Note 7, uno de sus teléfonos inteligentes más emblemáticos.
El anuncio llega después de que las compañías de telefonía celular en Estados Unidos y Australia dijeron que iban a dejar de reemplazar los Note 7 por las versiones más recientes del teléfono, debido a las preocupaciones de que estas no son más seguras que las versiones originales.
Defectos de origen
Poco después de que los Galaxy Note 7 llegaran a las tiendas en agosto, algunos usuarios informaron que sus teléfonos se incendiaban. Samsung retiró alrededor de 2.5 millones de unidades en todo el mundo el mes pasado, debido a las baterías defectuosas que sobrecalentaban los teléfonos y que provocaban que se incendiaran.
Se suponía que los nuevos teléfonos de reemplazo resolverían el problema, pero algunos clientes han reportado los mismos incidentes.
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Según la agencia EFE, Samsung dijo en un comunicado este lunes que iba a "ajustar" los envíos de los Note 7 para permitir inspecciones y un control de calidad más férreo debido al incendio de algunos dispositivos.
La compañía no hizo comentarios sobre el freno de la producción ni sobre la causa de los incendios, aunque la fuente, que no quiso ser identificada porque no estaba autorizada a hablar con los medios, no explicó si se habían encontrado problemas específicos ni cuándo se detendría la producción, dice la agencia EFE.