11 millones de autos de VW con software tramposo
El escándalo Volkswagen cobró este martes una dimensión planetaria, cuando la firma alemana confesó haber equipado 11 millones de coches en todo el mundo con un software destinado a manipular los resultados de los controles de contaminación.
La revelación provocó un nuevo hundimiento de las acciones del líder mundial de ventas de automóviles, que llegaron a perder más de 20% en la Bolsa de Fráncfort, después de haber caído cerca de 18% la víspera.
Nota: Así fue cómo se descubrió el engaño de VW
"Nuevas investigaciones internas han demostrado que ese software se había instalado en otros vehículos diésel", indicó la firma, que desde el viernes 18 de septiembre lidia con las revelaciones de que había colocado el dispositivo fraudulento en coches de Estados Unidos.
"Alrededor de 11 millones de vehículos en todo el mundo fueron equipados" con ese programa informático engañoso, admitió la compañía en un comunicado.
Volkswagen anunció además haber aprovisionado 6,500 millones de euros en el tercer trimestre del año para enfrentar las primeras consecuencias del caso, lo cual la llevará a "ajustar sus metas de beneficios de 2015".
"La embarramos": director ejecutivo
El director ejecutivo de Volkswagen en Estados Unidos, Michael Horn, admitió que el grupo automotriz fue deshonesto en las pruebas de emisiones contaminantes.
"Nuestra compañía fue deshonesta con la EPA (Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos) y el comité de Recursos del Aire de California, con todos ustedes (...), la embarramos totalmente", afirmó Horn en un evento en Nueva York a última hora del lunes.
La espiral del escándalo
Francia, Italia y Corea del Sur anunciaron que abrirán investigaciones y revisarán los automóviles de la empresa alemana Volkswagen.
Francia pidió este martes una investigación "a nivel europeo" para "tranquilizar" a los ciudadanos y para controlar a otros fabricantes europeos.
"Estamos en un mercado europeo, con reglas europeas, que deben ser respetadas", dijo el ministro galo de Finanzas, Michel Sapin, en declaraciones a la radio Europe 1.
"No se trata de temas menores, no se trata de una historia de velocidad o de calidad del cuero, se trata de lo que se hace para evitar que la gente sea envenenada por la contaminación", agregó.
Italia anunció que abrirá una investigación sobre el grupo alemán.
"Estamos preocupados por el asunto", escribió en una carta el ministerio de Transportes, quien pidió se aclare "si lo que ocurrió en Estados Unidos puede ocurrir en la Unión Europea, aun si las reglas de homologación son diferentes" y si vehículos de ese tipo han sido vendidos en Italia.
La autoridad italiana además solicitó al grupo alemán que le entregue "los certificados de control" de los vehículos.
Los representantes de Volkswagen en Corea del Sur fueron convocados por el Gobierno asiático para abordar los controles de emisiones de sus vehículos.
"El mes que viene empezaremos a llevar a cabo unos controles y anunciaremos los resultados a fines de noviembre", declaró Park Pan-Kyu, director adjunto del ministerio de Medio Ambiente.
Precisó que era demasiado temprano para contemplar eventuales multas contra el constructor alemán.
Se prevén despidos tras escándalo
Olaf Lies, político alemán y miembro de la junta supervisora de la empresa de automóviles dijo este lunes a la agencia Reuters que tras el escándalo 'van a rodar cabezas' en Volkswagen una vez se esclarezca quién es responsable de la falsificación de las pruebas de emisiones de diésel.
"Estoy seguro de que habrá consecuencias en la plantilla laboral al final del proceso, no hay duda de ello", indicó.
Lies anunció que primero deberá hacerse una profunda investigación para identificar a las personas que están implicadas en el asunto.
¿Qué denunció Estados Unidos?
Las autoridades estadounidenses revelaron que 482,000 vehículos de las marcas Volkswagen y Audi, fabricados entre 2009 y 2015 y vendidos en ese mercados, estaban equipados con un programa informático que detectaba automáticamente los controles de contaminación con el objetivo de falsear los resultados.
Como consecuencia del escándalo, la empresa anunció el lunes la suspensión de la comercialización en Estados Unidos de sus diésel de cuatro cilindros de las marcas VW y Audi, que representan el 23% de sus ventas en ese mercado.
Las pérdidas en Bolsa
Al menos 14,000 millones de euros (15,6000 millones de dólares) de capitalización bursátil del grupo alemán se esfumaron el lunes al perder más de 18% en la Bolsa de Fráncfort.
Este martes la acción de Volkswagen caía 19%, según datos de la Bolsa tomados a las 12:50 GMT.
¿De quién es la culpa?
El ministro de Economía de Baja Sajonia, el estado región alemán que posee el 20% de las acciones de VW, Olaf Lies, aseguró que el escándalo "no es generalizado".
"Ahora habrá que establecer quién sabía qué, quién tomó las decisiones", agregó el responsable, quien dio por descontado que rodarán cabezas en la dirección de Volkswagen.
El presidente de Volkswagen, Martin Winterkorn, tendrá que rendir cuentas de la situación en una reunión de una parte del Consejo de Vigilancia prevista para este miércoles, según el diario Handelsblatt.
En principio, el viernes próximo, Volkswagen tenía previsto prolongar el mandato de Winterkorn hasta finales de 2018, pero el escándalo pone todo en duda.
El fabricante corre el riesgo de convertirse en "un paria para el gobierno y quizás también para los consumidores norteamericanos", afirma Max Waburton, analista de Bernstein, citado por Bloomberg.