Automotrices chinas luchan por sacudirse la fama de mala calidad
¿Lo hecho en China está bien hecho? BAIC y JAC, las dos automotrices chinas que llegaron a México en el último año lidian diariamente con este cuestionamiento que se hacen los consumidores.
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Tras la incursión fallida de FAW en el país, hace 10 años, el mercado mexicano quedó con ‘un mal sabor de boca’ por la baja calidad de los autos y la poca disponibilidad de refacciones.
Para no repetir la historia, las dos marcas chinas que recién llegaron a la segunda mayor economía de Latinoamérica, lo hicieron de la mano de socios mexicanos interesados en abrir concesionarios en el país. No obstante, superar el estigma de 'la mala calidad' no ha sido fácil.
“La gente llega con mucha curiosidad, piensan que van a encontrar algo mal hecho, de mala calidad. Jalan las manijas, mueven las facias para ver si no se van a desbaratar”, dijo Eugenia Solís, gerente comercial de Grupo Zapata, uno de los grupos que distribuyen la marca JAC.
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BAIC, por ejemplo, llegó en octubre de 2016 de la mano de Grupo Picacho, una empresa mexicana distribuidora de las marcas Ford, Mazda, Jaguar y Lincoln.
De octubre a la fecha, abrió 10 concesionarios en la Ciudad de México, Querétaro y Estado de México, en las que ha vendido 670 unidades de sus modelos D20 y X35 en 2016.
Las cifra contrasta con los 1,499 automóviles que la sudcoreana KIA vendió en julio de 2015, su primer mes de ventas en el país, mientras que Hyundai logró comercializar 705 unidades en mayo de 2014, su mes de estreno.
Metas ambiciosas
Queremos llegar a 2,000 unidades este año y a 4,000 en 2018”, dijo Jimena Sáenz, directora de la marca BAIC en Grupo Picacho.
Para lograrlo, Grupo Picacho tiene el plan de abrir 10 concesionarios más este año y de lanzar otros dos modelos.
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JAC, que llegó a México de la mano de Carlos Slim, lleva unas 50 unidades vendidas en su primer mes y medio. “Parecen pocas, pero para ser una marca desconocida y no posicionada, sentimos que es un buen número”, dijo Solís.
JAC también llegó con una oferta inicial de dos modelos, un crossover y una SUV. Con el primer modelo, el SEI 2, busca atender un segmento poco explorado por la industria: el de los estudiantes o jóvenes que recién entraron al mercado laboral, y que buscan como primer auto un crossover.
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El precio de los modelos de este tipo, disponibles en el mercado, rondan los 300,000 pesos. JAC quiso atacar este mercado con el SEI 2, cuyo precio de lista es de 259,000 pesos.
Con el SEI 3 atiende a familias jóvenes en busca de su primer SUV. (Por Ivet Rodríguez)