Las energías renovables pueden desacelerar
La política del presidente estadounidense Donald Trump en materia energética —favorable a los combustibles fósiles— puede inhibir el desarrollo de las energías renovables en México; pero aún así, el país debe insistir en impulsar dichos proyectos, admitieron especialistas y funcionarios públicos.
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“Es algo que vino para quedarse y el país tiene grandes oportunidades para impulsar este tipo de energía”, advirtió el ex presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, en su calidad de presidente de la Comisión Global sobre la Economía y el Clima.
Pero afortunadamente las energías renovables ya no constituyen un asunto que dependa sólo del Gobierno federal de Estados Unidos, sino también de los gobiernos estatales como los de California y Texas, quienes ven a las tecnologías renovables para la generación eléctrica como un asunto de negocios, matizó Calderón Hinojosa.
En este sentido, el ex mandatario consideró que existen opciones para mantener la cooperación con Estados Unidos en materia energética y también para hacer de México un proveedor de electricidad de ese país a partir de tecnologías renovables.
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Sin embargo, es necesario liberar el comercio de este mercado y permitir la construcción de líneas de transmisión y suministro que corran a los dos lados de la frontera.
“Hay una gran oportunidad en el comercio internacional con la energía renovable, ojalá y México la aproveche, aunque hay que hacer otras cosas regulatorias como reducir los costos administrativos y de porteo y facilitar la interconexión, principalmente de los pequeños consumidores" de electricidad, expuso el ex mandatario al participar en el foro MirecWeek 2017.
Asimismo, Calderón Hinojosa destacó la importancia de eliminar los aranceles a los paneles solares que entran al país, ya que se dejan de generar empleos por esta situación.
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Argumentó que los puestos de trabajo que se pueden crear por fabricar paneles solares en el país son muy pocos en comparación con los que se pueden abrir tras la instalación de esta tecnología en casas e industrias del país.
Evitar distorsiones en el mercado
En el mismo foro, Héctor Márquez Solís, jefe de la Unidad de Energía de la Secretaría de Economía, admitió sí puede haber un retroceso o un reacomodo en el sector energético de México, tras la dinámica que adopte el gobierno estadounidense en relación con las tecnologías de generación limpia.
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“Nos preocupa que Estados Unidos pueda dejar de tener un papel activo al respecto y esto pueda alterar el plano multilateral. Ya no es tanto el cumplimiento de las metas, lo que nos preocupa es la dinámica en el tiempo de cómo mantenerlas o acelerarlas en ciertas partes sin dar un incentivo económico arbitrario que privilegie una tecnología sobre la otra”, dijo el funcionario.
Héctor Márquez comentó que el Gobierno mexicano trabaja para liberar los aranceles a los paneles solares, así como los de otros equipos que se utilizan en la industria de energías limpias.
“Para que esto sea sostenible también debe incentivarse la fabricación y manufactura de estos bienes y servicios dentro de territorio mexicano, ya que esto nos dará una ventaja en cuestión de costos y seremos más competitivos”, agregó Márquez.
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Ambos expositores manifestaron que, no obstante las políticas energéticas de Estados Unidos, la tendencia internacional apunta hacia el crecimiento de las tecnologías verdes.
Anteriormente se estimaba que a nivel global se podían invertir 2.8 billones de dólares (bdd) entre 2015 y 2030 en nueva capacidad renovable, pero ahora esta cifra puede ser de hasta 7.5 bdd, concluyó Calderón.