Pese a referéndum, Colombia es atractiva para empresas

La incursión de Molson Coors Brewing en Colombia a principios de este año fue recibida con bombo y platillo, con la cervecera que apostaba al crecimiento en el número de consumidores y a una nueva era de apertura en el mercado.

Entonces, a principios de este mes, los colombianos rechazaron inesperadamente el acuerdo de paz entre el gobierno y la guerrilla. El peso colombiano cayó y se volvió más probable una degradación en la calificación crediticia del país.

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Estos acontecimientos obligan a las empresas extranjeras a reevaluar los riesgos en un mercado que muchos han considerado que tiene un enorme potencial para que crezca, si su clase media continúa en expansión y la violencia puede sofocarse.

Molson Coors, que tiene oficinas generales en Denver y Montreal, dijo que las consecuencias del referéndum no han cambiado su perspectiva para invertir en Colombia, lo que incluye sus planes para trabajar con el gigante refresquero local Postobón para competir en el segmento de cerveza ligera.

Femsa, optimista en el mercado

Otras empresas internacionales, que van desde Telefónica hasta Fomento Económico Mexicano (Femsa), siguen sin inmutarse hasta ahora por los últimos acontecimientos políticos en el país andino.

La pregunta es si el gobierno puede reafirmarse después del revés y mejorar la imagen de Colombia como un lugar prometedor para invertir.

"Una gran parte de la historia a largo plazo dependía del acuerdo de paz", dijo Nishant Upadhyay, un gestor de portafolios que desde Nueva York supervisa cerca de 19,500 millones de dólares (mdd) en deuda de mercados emergentes en HSBC.

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Colombia, la quinta economía más grande de Latinoamérica, ha tratado de recuperarse este año después de que la inversión extranjera cayó 28% en 2015, a 11 ,700 mdd, arrastrada por la caída en el mercado de las materias primas.

Acuerdo implicaba 2 puntos para PIB

El acuerdo de paz se suponía que iba a abrir al desarrollo franjas enteras del país azotadas por la violencia por primera vez en décadas; el presidente Juan Manuel Santos previó de 1.5 a 2 puntos porcentuales de crecimiento adicionales al año gracias al acuerdo.

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Los esfuerzos por diversificar la economía con el propósito de reducir su dependencia del petróleo, carbón, café y oro han tardado en reafirmarse. De manera más inmediata, Colombia necesita recaudar impuestos este año para compensar la pérdida de ingresos procedentes del petróleo y evitar una degradación de las calificadoras.

Eso probablemente se logre mediante un proyecto de ley para aumentar los impuestos por ventas.

Labor de convencimiento

En un afán por tranquilizar a los mercados, Mauricio Cárdenas, el ministro de Hacienda, dijo que el gobierno planeaba enviar una propuesta fiscal al Congreso. "Vamos a luchar por una reforma fiscal", dijo el funcionario y agregó que la autoridad será muy estricta con la evasión de impuestos y exigente en el sector que no tiene fines lucrativos.

"Me temo que las contribuciones disminuirán, sin consecuencias positivas", dijo Sean Newman, un administrador de dinero senior en Invesco Advisers en Atlanta, cuya firma supervisa 800,000 mdd en activos. "Lo mejor es mantenerse al margen en este momento. Esta noticia es negativa para todos los activos colombianos”.

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El Senado recientemente aprobó una ley que eleva algunos impuestos a los licores, evidencia de que el gobierno de Santos todavía puede lograr que se aprueben proyectos de ley en el Congreso, dijo Cárdenas en una entrevista con Bloomberg Television.

Algunas compañías dicen que ven el referéndum de paz desde una perspectiva diferente. A pesar de que el acuerdo fue rechazado por un estrecho margen, el resultado de la votación fue aceptado por la mayoría de los colombianos y las partes involucradas en el acuerdo de paz se comprometieron posteriormente a trabajar en un acuerdo.

Costos de la democracia

Ese resultado refleja la fortaleza de la democracia de Colombia, dijo una persona familiarizada con las opiniones de Telefónica, una de las compañías de telefonía inalámbrica más grandes del país. El país representa 2.8% de las ventas totales de la telefónica con sede en Madrid.

Femsa, la mayor cadena de tiendas de conveniencia de Latinoamérica y el mayor embotellador de Coca-Cola, apuestan a que el gobierno continúe con sus planes de modernización y que apoye una reforma "estructural no discriminatoria que sea progresiva, que estimule la inversión, que promueva el crecimiento industrial y que respalde las garantías judiciales", dijo la empresa.

"Entendemos esto como un tiempo para reflexionar y para construir un país con más y mejores oportunidades para todos", dijo la oficina de comunicaciones de Femsa en un correo electrónico.

"Reiteramos nuestro compromiso con Colombia, sus instituciones y gobernantes y mantenemos nuestros planes estratégicos de consolidación en el país”, concluyó la empresa mexicana.