
De acuerdo con FINSA, Jalisco ocupó en 2020, el tercer lugar a nivel nacional en atracción de Inversión Extranjera Directa (IED), y es uno de los mercados que ofrece condiciones idóneas para el desarrollo de espacios industriales gracias a su ubicación geográfica y comunicación terrestre con el puerto de Manzanillo, una ventana del mercado asiático a occidente.
Otros factores que hacen atractivo a este destino, según la empresa, es la cercanía con la Ciudad de México y la zona del Bajío, su infraestructura carretera y una fuerza laboral de 3.39 millones de personas altamente capacitadas en sectores de alta tecnología, electrónica, manufactura, telecomunicaciones y automotriz.
En menos de tres meses, FINSA ha realizado la adquisición de tres portafolios por un total de 76,858 metros cuadrados, en diversas zonas industriales de: Monterrey, Sonora, Guanajuato y Guadalajara, por un monto acumulado de 43.7 millones de dólares, sumando una ubicación más a sus 63 restantes.
Uno de ellos fue la compra de 26,032 metros cuadrados distribuidos en dos parques industriales en Hermosillo y Celaya, por un monto de 15.5 millones de dólares.
Ambas propiedades son ocupadas por la canadiense Magna Assembly Systems y la francesa Delfingen México, ambos del ramo automotriz.
“La dinámica de las regiones en las que hoy invertimos ha sido impulsada principalmente por el sector automotriz y, en el caso de Sonora, el aeroespacial. Ambas ubicaciones tienen un potencial logístico de gran relevancia. Tenemos plena confianza en la solidez de ambos mercados”, señaló Argüelles, en su momento.