Primero aprovechó su talento y luego lo acusa de robo
Anthony Levandowski es el ex ingeniero de Google que provocó un conflicto entre el gigante de la tecnología y Uber Technologies. La razón, es que Alphabet —la holding de Google— lo acusa de robarse su tecnología de autos autónomos para utilizarla en Uber.
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Google tiene por política alentar a los empleados a dedicar 20% de su tiempo de trabajo a proyectos paralelos de su elección que beneficien a la empresa, pero que no atenten contra sus intereses, refiere un reporte publicado por el diario Dow Jones y difundido en México por Sentido Común.
Incluso ha creado una incubadora para sus empleados, que tiene el propósito de financiar nuevas empresas al interior dentro de la compañía.
Tras ser contratado en 2007 por Google, Levandowski, entonces de 27 años, registró una nueva empresa —510 Systems—, con el propósito de venderle un sistema de sensores a Google para el mismo proyecto, según consta en registros públicos y declaraciones de ex empleados de ambas empresas.
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La tecnología desarrollada por 510 Systems ayudó a Google a crear sus propios mapas y evitar el pago por los datos a terceros. Cuando Google lanzó su programa automotriz en 2009, uno de sus primeros vehículos fue un Toyota Prius que los ingenieros de Levandowski y 510 Systems habían preparado para un programa de televisión.
El problema ahora es que Alphabet acusa a Levandowski de robar su tecnología de autoconducción y de llevarla a Uber, empresa a la que se unió como jefe de su proyecto del automóvil sin conductor el año pasado, después de ganar más de 120 millones de dólares (mdd) en Google, refiere el reporte de Dow Jones.
Alphabet ha presentado dos demandas de arbitraje contra Levandowski y también demanda a Uber por supuestamente conspirar con él.
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Hace quince días, el juez que oye la demanda civil pidió a los fiscales federales que investigaran las acusaciones de Alphabet de que Levandowski robó secretos comerciales de la empresa.
Mientras tanto, Uber —que se dedica al transporte privado compartido— niega los actos ilícitos e impugna las acusaciones en los tribunales.