Un capítulo de energía en el TLCAN será positivo
La posible incorporación del sector energético mexicano al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) creará un mercado que establecerá un sistema de pesos y contrapesos con Medio Oriente y Rusia, además de que dará mayor certeza jurídica a las inversiones en México.
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Europa siempre se ha sentido vulnerable por la posibilidad de que el gobierno ruso cierre el suministro de gas, por lo que en este nuevo contexto, la región de Norteamérica puede ser una opción viable, consideró Miriam Grusntein, académica de la Universidad Panamericana.
"Estamos hablando de la posibilidad de tener un mercado energético de América del Norte, lo cual me parece la mejor solución para establecer un sistema de pesos y contrapesos con Medio Oriente y con Rusia".
La especialista también opinó que el TLCAN puede dar una carta más de protección jurídica a la inversión extranjera en el sector energético. Por ejemplo, Estados Unidos puede insistir en este punto para proteger a sus empresas de actos expropiatorios, rescisiones o terminación arbitraria de los contratos.
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"Puede ser que pidan el cambio en ciertos artículos de la Ley de Hidrocarburos. Algunos son muy incómodos para la inversión, como la facultad de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) para dar por terminados los contratos", hizo ver la académica.
Sin embargo, Grusntein opinó que las empresas no van a dejar terminar el TLCAN al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya que sus votantes pidieron una rendición de cuentas y que les dejara hacer negocios donde quisieran.
"Las empresas no lo van a dejar. Trump no exporta gasolina, la empresa Valero exporta gasolina, Shell exporta gasolina, el modelo americano está muy pulverizado, son cientos o miles de empresas energéticas de todos tamaños con un poder de cabildeo grande ante el Congreso de Estados Unidos”, aseveró Grunstein.
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"Somos vecinos (de Estados Unidos). Además Canadá se está interesando en México, especialmente en el sector energético. Veo a Canadá en todas partes, colaborando en muchas universidades mexicanas, acercarse a varios funcionarios, quieren estar aquí, les conviene", sostuvo la académica.
Grunstein destacó que este es un momento muy importante, porque por primera vez los mexicanos vamos a tener un TLCAN con un capítulo de energía, que antes no estaba incluido porque México lo había reservado y había dos monopolios de Estado.
"Yo creo que nuestra suerte económica no va a cambiar sustantivamente si no se renegocia integralmente el tratado. Creo que tenemos poco tiempo, no por nosotros, Estados Unidos se tarda entre dos y tres años en un tratado internacional, tiene muchísimo resquemor cuando se trata de tratados internacionales", concluyó.
