Después de Renault, ahora Nissan destituye a Ghosn como su presidente
El empresario Carlos Ghosn, artífice de la alianza automotriz Nissan-Renault-Mitsubishi, fue señalado como sospecho de haber instruido a Greg Kelly, su confidente y director Representante de Nissan Motor, para que falsificara documentos relacionados con su salario.
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En lo que la fiscalía de Japón hacía estos planteamientos, Nissan Motor decidió destituir a Ghosn como presidente de la compañía, tras casi dos años de estar al frente de la armadora.
Durante una reunión que se prolongó unas cuatro horas, la Junta Directiva de la empresa votó por unanimidad a favor de despedir a Ghosn y a su director Representante, Greg Kelly, informó Nissan Motor en un comunicado divulgado por la agencia japonesa de noticias Kyodo.
La japonesa Mitsubishi también ha confirmado que destituirá a Ghosn como presidente, en tanto que Renault ya nombró a Thierry Bolloré, como director provisional.
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Asimismo, la Junta Directiva de Nissan confirmó que su alianza con Renault “permanecerá intacta” y destacó la necesidad de “minimizar el potencial impacto y la confusión en la cooperación diaria entre sus integrantes”, según el comunicado de la armadora.
Sospecha tras sospecha
Ghosn, de 64 años —presidente de la alianza tripartita—, y Kelly, de 62 años, fueron arrestados el lunes pasado por supuestamente haber falseado la remuneración de Ghosn en los informes de valores presentados a los reguladores japoneses.
El franco-brasileño es uno de los ejecutivos de alto perfil en la industria automotriz mundial, que pasó de ser el salvador de Renault y Nissan a ser arrestado por conducta financiera indebida.
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Mediante correos electrónicos, Ghosn instruyó a Kelly para que falsificara documentos financieros relacionados con su paquete de remuneraciones en uno de los mayores escándalos del mundo financiero.
Se cree que los fiscales se apoderaron de los correos electrónicos como evidencia de la conducta de Ghosn, revelaron fuentes consultadas por la agencia japonesa de noticias Kyodo News.
Con base en esas presuntas instrucciones, Kelly supuestamente ordenó a dos de sus subordinados inmediatos, un ejecutivo a cargo de asuntos legales y un empleado de alto nivel, que manipularan el contenido de los documentos, comentaron las fuentes.
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Ghosn solo involucró a los subordinados cercanos para ocultar la presunta irregularidad, quienes presuntamente llegaron a un acuerdo con los fiscales y quienes probablemente mostraron evidencia relacionada con el caso.
¿Nissan quería desprenderse del control francés?
El magnate nacido en Brasil, que posee la ciudadanía francesa, enfrenta el cargo de violar la Ley de Instrumentos Financieros e Intercambios de Japón, al reportar su remuneración de un total de aproximadamente 5,000 millones de yenes —unos 44 millones de dólares (mdd)— durante cinco años hasta marzo de 2015.
Desde 2010, las empresas que cotizan en bolsa de Japón tienen la obligación de publicar las remuneraciones anuales de sus ejecutivos que sean iguales o superiores a 100 millones de yenes, o sea unos 880,000 dólares.
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La Fiscalía de Tokio sospecha que Ghosn pudo haber comenzado a declarar ingresos menores que los reales para evitar críticas por su abultado salario.
Un juzgado de Tokio autorizó ayer miércoles a la fiscalía prorrogar 10 días la detención del presidente de Nissan, Carlos Ghosn, en Japón, bajo la acusación de minimizar sus ingresos.
Además de ocultar casi la mitad de su millonaria compensación entre 2010 y 2014, Ghosn también había dejado supuestamente de declarar pagos extraordinarios que empezó a recibir en el año 2010 y cuyo total asciende a unos 33 mdd.
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El diario japonés Asahi Shinbun publicó una versión en el sentido de que la detención del ejecutivo el pasado lunes por la policía japonesa pudo ser el resultado de una estrategia de Nissan para frenar el control de su socio francés Renault.
El gobierno francés, propietario de 15% de Renault, puede tener interés en que Nissan trasladara producción manufacturera a Francia y que creara empleos, según el rotativo.