Para el sector automotriz en nuestro país, los encargados de Relaciones Públicas y Gubernamentales --RP y G, que algunas empresas llaman Director de Asuntos Públicos-- además de estudiar a fondo el sector y todas la políticas públicas que pueden impactar sus operaciones, también deben estar conscientes de que no pueden permitir, por ningún motivo, que usen a su empresa para engordar la agenda de otra compañìa, menos aún si el tamaño de la empresa a la que representas es mayor que el resto.
En pocas palabras: el más grande debe ser el más influyente. PUNTO. Así de sencillo.
Este comentario viene al caso debido a que en días pasados se realizó un evento del Consejo Ejecutivo de Empresas Globales (CEEG) con Enrique Peña Nieto, presidente de la República, en donde, además, participaron Luis Videgaray, secretario de Hacienda; Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía e Ildefonso Guajardo, titular de la Secretaría de Economía, entre otros miembros del gabinete.
Durante ese foro se dio a conocer un compromiso de inversión por 11,172 millones de dólares (mdd) y derrama económica en México durante el 2015 por poco mas de 13,500 mdd, cifra proveniente de sus 39 agremiados en donde se encuentran empresas como Pepsi Co., Siemens, Schneider Electric, Chrysler, GM, Exxon Mobil, entre muchas otras.
A diferencia de lo dicho anteriormente, el CEEG no está presidido por la empresa más grande. Pedro Padierna, presidente de Pepsi Co. es el titular del organismo. Se trata de un ejecutivo ampliamente respetado en el sector, por su gran liderazgo y su capacidad para el manejo de las relaciones gubernamentales. Y vaya que es hábil, ya que controla la agenda del CEEG.
Celebro el anuncio, porque es positivo para el país. Busca atraer la confianza de los inversionistas internacionales, reunió a los más importantes directores generales que representan los intereses de estas multinacionales en México (con algunas ausencias). Sí, todo eso está muy bien, sin embargo si lo estudiamos desde el contexto de la estrategia que debería seguir la industria automotriz como sector, entonces no solamente no lo celebro, sino que me parece que es preocupante.
Seamos claros. Por más refrescos , bebidas, dulces y botanas que venda la PepsiCo. del señor Pedro Padierna, no superará ni siquiera las inversiones y derrama del gasto anual corriente en México de sus dos agremiados en el CEEG del sector automotriz por separado, que son Chrysler y GM.
Por otra parte, si en lugar de participar en el CEEG tanto Chrysler como GM se unirán con verdadera estrategia de influencia la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), podrían lograr una mayor influencia como sector, el cual tan sólo en 2014 reportó divisas netas referentes a exportaciones por más de 30,000 mdd, obteniendo por segundo año consecutivo el sector automotriz más divisas netas para el país que el petrolero.
Tan solo GM representa compras a proveedores nacionales que superan la cifra de gastos de operación del CEEG para el mismo periodo, alcanzando GM muy probablemente este año 14,000 mdd de compras en México.
El tema es que Chrysler y GM pueden representar, tan solo estas dos empresas, 50% de lo reportado de inversión para 2015 del CEEG, entre las dos superan por mucho las compras proveedores nacionales que reportó esa agrupación. ¿Por qué, entonces, apoyar a un CEEG que divide la atención del presidente de la República hacia otros sectores?, ¿por qué no mejor fortalecer a AMIA de Eduardo Solís y hacer un frente común y mostrar su músculo juntos?
NISSAN, VW, AUDI, BMW, GM, FORD, MAZDA, HONDA, CHRYSLER, TOYOTA Y KIA, son mucho más grandes que el CEEG, ¿por qué no tener una reunión similar pero que represente únicamente al sector que mas empleo e inversión ha traído al país?, tan sólo para este sexenio las inversiones de la industria automotriz superarán los 15,000 mdd y las compras a proveedores nacionales anualmente ya supera es misma cifra.
Cómo puede ser que la Industria Automotriz, en su conjunto, no haya podido unirse en esta administración para generar un evento com el realizado por el CEEG y construir políticas públicas que detonen la inversión y el empleo y tengan GM y Chrysler que buscar otras opciones para limosnear una posición y engordar la agenda del CEEG, cuando quienes las importantes en el CEEG son las automotrices.
Quizá sus directores generales y RG no se han dado cuenta de ello. Y si es así... pues qué chambones.
*Director ejecutivo de Fondo Unido México, catedrático RRPP y comunicación estratégica en el ITESM. Especialista en la industria automotriz.