Administración de flotillas, eslabón para la competitividad
Nota del editor: Fernando Noriega Treviño es director general de Idealease México. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivas de su autor.
(Manufactura) — En términos comerciales el mundo se está reacomodando y, en esa dinámica, los empresarios en México están llamados a modernizar sus procesos tradicionales para ganar competitividad en un nuevo marco de negocios.
La industria del transporte ha dado un paso importante en este proceso de adaptación a los nuevos desafíos ofreciendo esquemas de negocio que brindan certeza financiera a los empresarios del país a través de modelos que no requieren inversión en equipo de flotillas, talleres, ni costos administrativas relacionados a la operación de los camiones de carga de distribución primaria y reparto local.
En el entorno económico actual es indispensable que los empresarios mantengan bajos los costos de operación en la administración de sus flotas. Para ello, deben mejorar sus rutas, minimizar el ralentí, limitar la velocidad a partir de la programación de los motores, medir consumo de combustible y monitorear los hábitos de manejo en tiempo real con el uso de soluciones tecnológicas basadas en telemetría.
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La mayoría de las flotas privadas tienen una característica en común: su razón de existir es básicamente transportar productos y proporcionar servicios. Cuando una empresa adquiere camiones tiene que invertir en su mantenimiento, reparaciones, almacenes de refacciones, capacitación de mecánicos y la administración de la flotilla, lo cual obliga a los empresarios a invertir en asuntos no estratégicos para el negocio.
Desarrollar en cambio esquemas de renta de camiones de acuerdo a las necesidades específicas de la empresa minimiza la cantidad de personal y recursos necesarios para mantener los camiones en operación a través de soluciones tercerizadas que permitan determinar la frecuencia y el mantenimiento preventivo adecuado para las unidades de transporte a un costo muy por debajo de la inversión que demandaría el equipamiento y mantenimiento de un taller profesional.
El mantenimiento es una de las características más atractivas de rentar, dado que en los últimos años la tecnología evoluciona constantemente y tener un equipo operando al día es un reto difícil de lograr.
Con esquemas de arrendamiento a la medida es posible garantizar que los camiones estén disponibles para trabajar mínimo el 95% del tiempo. Operar bajo esta premisa asegura que las unidades están listas para entregar, y si le sumamos la flexibilidad que tienen, para rentar en corto y largo plazo para cubrir sus requerimientos de camiones extra.
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El cambio de paradigma es inminente. Una encuesta reciente de la Truck Rental and Leasing Association (TRALA) muestra que el 25% de los tracto camiones clase 8 que circulan por las carreteras de Estados Unidos son rentados por uno de sus miembros.
Si bien no existen reglas estrictas sobre cuándo comprar o cuándo rentar, hay ventajas operativas para las flotas de camiones que optan por la renta con mantenimiento incluido pues disminuye el riesgo financiero, libera capital para utilizarlo en áreas estratégicas del negocio, elimina la inversión en talleres y carga administrativa por mantenimiento y rescates carreteros, entre otros.
Asimismo los esquemas de renta permiten conocer con certeza el costo total de operación en la vida del camión en la flotilla y eliminar los costos operativos relacionados con el mantenimiento de las unidades, transfiriéndolo a un esquema de arrendamiento que es una alternativa que agregará competitividad a los empresarios cuya oferta depende en algún momento del transporte de carga.
