En Ohio aseguran que fracturación hidráulica causó sismos
Recientes sismos en Ohio podrían haber sido generados por el proceso de fracturación hidráulica o fracking, dijeron reguladores estatales, un nuevo problema que podría tener implicaciones para las perforaciones de petróleo y gas en ese y otros estados.
En la declaración más fuerte por parte del estado sobre el vínculo entre perforaciones de la industria y los sismos, el Departamento de Recursos Naturales de Ohio (ODNR, por su sigla en inglés) dijo que la inyección de arena, agua y químicos en tierras profundas para liberar petróleo y gas pudo producir temblores en Poland Township el mes pasado.
El comunicado, en el cual el departamento anunció reglas más estrictas para la exploración de crudo y gas en áreas donde ha habido actividad sísmica, se produce tras un fuerte incremento de los movimientos telúricos en Ohio y otras zonas donde se han realizado perforaciones intensas.
La mayoría de los terremotos ocurren naturalmente, pero desde hace tiempo los científicos están vinculando algunos pequeños temblores al trabajo subterráneo para extraer petróleo y el gas, que puede alterar puntos de presión y causar cambios en la tierra.
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El mes pasado, las perforaciones y la fracturación hidráulica fueron suspendidas cerca del lugar de dos temblores en Poland Township, en el noreste de Ohio, unos 110 kilómetros al sureste de Cleveland. El primero de los sismos fue de magnitud 3,0, suficiente para sentirse kilómetros a la redonda.
El pasado fin de semana hubo sismos en Oklahoma, los últimos de una serie que han llevado al estado a registrar una actividad sísmica récord este año, que según sismólogos podrían estar relacionados con la exploración de crudo y gas.
"De acuerdo a los eventos sísmicos en Poland Township, geólogos de ODNR creen que la arena y el agua inyectada en pozos petroleros durante el proceso de fractura hidráulica puede haber incrementado la presión sobre una microfalla desconocida en el área", dijo ODNR en un comunicado.
La declaración del viernes podría tener incidencia no sólo en un estado en el que las perforaciones están en auge, sino también en otras regiones donde han surgido preocupaciones por el impacto de la fracturación hidráulica.
Las nuevas normas exigen que una compañía instale monitores sísmicos en caso de que esté realizando perforaciones dentro de un rango de unos 4,8 km de una falla conocida o un área que haya experimentado terremotos recientemente, informó ODNR. No queda claro cuántas actividades de perforación se verán afectadas por las nuevas reglas.