Metalsa trabaja en pick up eléctrica
El productor de autopartes Metalsa trabaja un prototipo de pick up eléctrica para adelantarse a una tecnología que es muy latente y ser de los primeros en responder al cliente, dijo Ricardo Prado, responsable del proyecto.
“La experiencia que hemos tenido, y como podemos ver en varias partes del mundo, en la mayoría de los desarrolladores de este tipo de tecnología, ya sea baterías, suspensiones, desarrollo de controladores, y el chasis cambia por completo; entonces más nos vale entender de una vez cómo diseñar algo y estar listos para cuando el cliente nos lo pida”, apunta.
La compañía a través de un consorcio formado por tres empresas mexicanas y otra en España busca llamar la atención de las armadoras, algunas de ellas ya son sus clientes, lo que da cierta ventaja al no arrancar desde cero, dice. El proyecto se encuentra en la última fase de la etapa de diseño.
No obstante, al ser una pick up eléctrica tendrá ciertas limitaciones, aunque no tiene una aplicación especial, y conserva las características de ese modelo.
“A diferencia de muchas de las pick up eléctricas que ya están saliendo, que se conoce como retrofit, esto no es eso. Toda la parte de debajo de la pick up eléctrica está diseñada y adaptada para que funcione como una pick up, no es el mismo chasis, es una suspensión completamente diferente; obviamente un tren motriz completamente diferente. Cambian precisamente las cosas que deben cambiar para una aplicación para una pick up”, agrega.
Metalsa produce una parte del prototipo en sus propias instalaciones, aunque hay proveedores y desarrollos en varias partes de Estados Unidos y Europa.
La etapa de comercialización del vehículo se logrará hasta que alguna armadora se interese en el proyecto, expresa.
“Vemos este proyecto como un anteproyecto explorador, aunque vamos a tener un prototipo; sabemos que estamos corriendo riesgos porque los vehículos eléctricos crecen poco a poco. Puede darse el caso que las armadoras no lo aceptan porque prefieran vehículos híbridos, estamos concientes de ese riesgo al igual que los participantes en el consorcio, incluso CONACYT”, asegura.
Aun cuando Metalsa decida no seguir participando, hay logros importantes, por un lado una base de datos enorme que permitirá hacer cualquier adaptación; también hay una respuesta favorable de las armadoras, que ven con buenos ojos la propuesta aunque no por el momento, “pero les va a interesar, eso nos da mucho valor”, manifiesta.
Ricardo Prado indica que en caso de llegar a producirse la pick up eléctrica sería por una cantidad de entre tres y cuatro por ciento de la pick up que se llega a fabricar de 150 mil unidades anuales.