Glencore pone un pie en el mercado mexicano de combustibles
La minera y operadora de materias primas Glencore prevé comenzar a importar combustibles para el mercado local de México en febrero de 2018, a través de una terminal propia en el estado de Tabasco, informó el jefe de la división de petróleo de la empresa anglosuiza, Alex Beard.
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El combustible será comercializado por una gran red de estaciones de servicio operada por Corporación G500 de México, agregó el ejecutivo.
Por lo pronto, la primera estación de servicio de la red G500 Network —creada por Glencore y G500— fue inaugurada este jueves en el municipio de Tlalnepantla, Estado de México.
"Nosotros esperamos importar como Glencore al país tan pronto como se complete la infraestructura independiente, probablemente en febrero de 2018 para Dos Bocas (terminal de almacenamiento en Tabasco) y esperamos que en Tuxpan (Veracruz) para la primera mitad de 2019. Antes de eso, seguramente participaremos en la temporada abierta", dijo Beard.
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El combustible importado por Glencore será distribuido a unas 1,400 estaciones de servicio operadas por el consorcio G500, formado en 2014 a partes iguales por la firma anglosuiza y propietarios de estaciones independientes tras la reforma energética de México.
La red actualmente comercializa cerca de 160,000 barriles por día (bpd) de gasolina y diesel en varios estados del centro de México, lo que representa alrededor de 12% del sistema de estaciones del país.
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Se planea una remodelación de los puntos de venta para que trabajen bajo la nueva franquicia.
Crece el interés por la apertura del sector
La paulatina liberalización de los precios al por menor de los combustibles en México ha impulsado oportunidades de negocios para grandes empresas de refinación y comercio que quieren distribuir y vender gasolina y diesel importados.
Refinerías estadounidenses, entre ellas Valero Energy y Tesoro, también han anunciado sus planes de participar en el mercado de combustibles de México.
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La empresa local de minería e infraestructura Grupo México construye nuevas terminales para descargar las importaciones independientes de combustible y luego distribuirlas por ferrocarril.
Al presente, la petrolera estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) todavía es el mayor importador, distribuidor y vendedor de combustibles en México.
