La farmacéutica Pfizer espera desplegar rápidamente su vacuna contra el COVID-19 en América Latina después de que los reguladores de salud de Estados Unidos autoricen su uso de emergencia, lo que podría suceder el próximo mes, de acuerdo con Alejandro Cané, el jefe de Investigación Científica y Asuntos Médicos de la División de Vacunas de Pfizer.
El directivo mencionó a Reuters en una entrevista en Argentina, que los países de América Latina y otras regiones deberían tener "líneas de tiempo similares" a las de Estados Unidos.
"La idea es tener la vacuna autorizada en Estados Unidos (...) Estamos seguros de que en las próximas semanas o meses vamos a tener la vacuna no solo en uso en Estados Unidos y Europa, sino también en países de América Latina".
Pfizer dijo que pedirá a los reguladores estadounidenses que autoricen el uso de emergencia de su vacuna contra el COVID-19, la primera solicitud de este tipo y un paso crucial para ofrecer protección contra el coronavirus.
"Estamos esperando comentarios de la FDA para tener una reunión con el Comité Asesor sobre Vacunas y Productos Biológicos Relacionados (VRBPAC, por su sigla en inglés) y después una potencial autorización para el uso de emergencia", explicó Cané.
"De esa manera, la vacuna podría usarse y distribuirse en Estados Unidos", agregó, y estimó que la autorización podría darse una o dos semanas después de la reunión con el Comité.
Cané dijo que Pfizer tenía acuerdos de suministro con Chile, México y Perú y que hay otras conversaciones en curso.
El camino a la distribución
En paralelo el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, comentó que la solicitud en Estados Unidos "representa un paso crucial" en la misión de la alianza entre la estadounidense y su socio alemán BioNTech,por lograr una vacuna contra el covid-19 al mundo.