Si México produce gasolinas, captará menos divisas por venta de petróleo
La consultora KPMG considera que elevar la capacidad de producción de gasolinas de México implicará renunciar a las divisas por la exportación del crudo que obtiene el país, de modo que la contribución de estas para las finanzas públicas se cambiará por aquella que se genere a través de recibir ingresos por la venta de gasolinas.
El año pasado, la plataforma nacional de producción petrolera fue de 1.9 millones de barriles diarios, mientras que al Sistema Nacional de Refinación (SNR) se destinaron 800,000 barriles.
Leer: ICA tiene interés en construir la nueva refinería de AMLO
Debido a esto, las refinerías operaban a 40% de su capacidad, pero si este indicador se elevara a 85%, las refinerías podrían procesar hasta 1.3 millones de barriles diarios.
Sin embargo, “esta alternativa implicará renunciar a las divisas por la exportación del crudo que en la actualidad se comercializa en los mercados externos y su contribución se cambiaría por aquella que se genere a través de recibir ingresos por venta de gasolinas, deduciendo todos los costos y gastos de operación del proceso de refinación”, afirmó KPMG a través de un documento de análisis.
El desafío de rehabilitar 6 refinerías
Asimismo, la consultora consideró que el precio de la gasolina puede alcanzar un nivel aceptable en función del libre mercado, así como del estímulo que aplican las autoridades hacendarias en la actualidad, pero también en función de una nueva política de precios.
Expuso que el monto de la inversión que prevé la siguiente administración para la nueva refinería en Dos Bocas y la reconfiguración de las existentes se encuentra dentro de parámetros internacionales, pero que su financiación, tiempo estimado para operación y puesta en marcha en tres años, lo convierte en un proyecto retador.
Leer: IEnova cosigue su 6a terminal marítima de refinados en México
La próxima gestión federal anunció la construcción de una refinería en Dos Bocas, Tabasco, con un costo de 160,000 millones de pesos (mdp), así como la reconfiguración y rehabilitación de las seis refinerías existentes con una inversión de 155,000 mdp.
Además, la ubicación de la nueva refinería puede incrementar el riesgo para el transporte de gasolina, al estar más lejos de los principales centros de consumo en el centro, norte u occidente del país.
Leer: López Obrador se reúne con empresa de EU para hablar de la nueva refinería
“Al transportarse crudo solamente, no existe peligro de robo, debido a que es necesario refinarlo, por lo que la ubicación de la nueva refinería cercana a alguno de los principales centros de consumo sería deseable”, insistió KPMG en su análisis.
2 plantas pendientes
Asimismo, la consultora precisó que tres de las refinerías existentes ya están reconfiguradas (Madero, Tamaulipas; Cadereyta, Nuevo León, y Minatitlán,Veracruz), mientras que la de Tula está en proceso de reconfiguración desde diciembre de 2014, con un presupuesto inicial de 4,600 mdp. En tanto, las plantas pendientes de reconfigurar son las de Salina Cruz, Oaxaca, y Salamanca, Guanajuato.
Leer: Fullgas acusa: Pemex ofrece un mejor trato a gasolineras extranjeras
KPGM explicó que “una reconfiguración consiste en añadir un segundo proceso de destilación a partir del subproducto del primer proceso de refinación”. Esto es que, a partir del combustóleo, se pueden obtener gasolinas y productos de valor agregado, al utilizar coquizadoras y generar como subproducto coque de petróleo (carbón), lo que costaría alrededor de 88,000 mdp.
