El crecimiento de Continental tiene su componente mexicano
CIUDAD DE MÉXICO.- Continental se ha dado cuenta que, desde hace mucho tiempo, su negocio dejó de tratarse solo de neumáticos.
Aunque el segmento de llantas todavía representa más de un cuarto de sus ventas, la multinacional alemana ha incursionado en diferentes negocios, desde hule para mangueras industriales y tenis Adidas —una alianza que lleva más de una década—, hasta diseño de software para soluciones de movilidad autónoma.
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Marco Galluzzi, vicepresidente de Recursos Humanos de la empresa, explica que la compañía actualmente tiene cinco divisiones: neumáticos —que representa 26% de las ventas—; chasis y seguridad, en el que desarrolla frenos, cinturones y software (22% del negocio); interiores, dedicado a productos de conectividad, control y de operación de vehículos (21%); powertrain, que se dedica a soluciones de electrificación, así como optimización de gasolina y diesel (17%); y ContiTech (14%), que investiga el desarrollo de tecnologías de automatización.
Una de las estrategias de la compañía para expandirse ha consistido en la compra de negocios de menor tamaño, pero de alta especialización.
La más reciente fue la adquisición de Kathrein Automotive, un fabricante alemán de antenas y satélites, que le permitirá desarrollar antenas inteligentes para nuevas soluciones de movilidad.
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Para el desarrollo de estos segmentos, Continental ha decidido ampliar su presencia en México. Actualmente, la empresa posee en el país la mayor plantilla de colaboradores fuera de Alemania, con 26,000 empleados de un total de 244,000 en todo el mundo.
El mercado de América del Norte es prioridad
En el territorio nacional, Continental tiene 21 plantas y dos centros de investigación y desarrollo y recientemente anunció la construcción de una nueva planta en Aguascalientes, con una inversión de más de 52 millones de euros que generará 1,000 empleos en los primeros cinco años.
Más allá de ser indicador de México como una potencia en el sector manufacturero, también habla de la importancia de un mercado como el norteamericano, que es el más importante no solo para la compañía, sino para el sector automotor.
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En materia de exportaciones, Estados Unidos y Canadá son el primer y segundo mayor cliente del país, lo que se potencia debido a la interconectividad mediante acuerdos como el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), considera Galluzzi.
Sin embargo, esta interdependencia también ha representado un desafío. En 2018, la producción de vehículos disminuyó en Estados Unidos, lo que implicó una menor demanda de insumos y presionó a las firmas de autopartes, como la compañía alemana.
De ahí que, en el corto plazo, Continental se centrará en su planta de Aguascalientes, en México, con contrataciones que comenzarán el próximo año.
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A nivel mundial, las cifras preliminares de la compañía indican un crecimiento 3% en las ventas anuales y un flujo operativo (EBITDA) que avanzó 9.2% en 2018, mientras que para este año se prevé un margen similar, de 8% a 9%.
