Mal tiempo en el Golfo pone en alerta a las petroleras

Las petroleras en Estados Unidos están vigilando de cerca un enorme disturbio tropical en el sur del Golfo de México, pero han anunciado alguna modificación en sus operaciones pese a que hay 70% de posibilidades de que el sistema se convierta en una tormenta en las próximas 48 horas, según el Centro Nacional de Huracanes.
Encabezando las compañías en el Golfo, Shell Oil Co, el brazo estadounidense de Royal Dutch Shell, dijo que estaba haciendo seguimiento al sistema. "Estamos manteniendo un ojo ahí, pero no haremos cambios en las operaciones aún", dijo el portavoz de Shell Ray Fisher.
El sistema aún no ha sido clasificado como una tormenta tropical o un huracán, pero estaba produciendo vientos de unos 61 kilómetros por hora, cerca de la mitad de lo que genera un huracán débil.
El Centro Nacional de Huracanes, así como meteorólogos académicos y privados están esperando una temporada de huracanes en el Atlántico por debajo del promedio. La temporada comenzó el 1 de junio y dura hasta el 30 de noviembre.
Algunos expertos han advertido que la mejor oportunidad para que una tormenta tropical se desarrolle en las áreas de producción de petróleo frente a la costa de Estados Unidos podría llegar a principios de la temporada de huracanes.
Se espera que un fenónemo climático El Niño se forme en el Pacífico oriental a finales de este verano boreal, lo que enviaría fuertes vientos en todo el sur de Estados Unidos, alterando el desarrollo de tormentas tropicales.
El Golfo de México representa un 17 por ciento del bombeo estadounidense de petróleo y un 5 por ciento de la producción nacional de gas, según la gubernamental Administración de Información de Energía.
Los estados de la costa estadounidense del Golfo, Texas, Louisiana y Misisipi, también son responsables de más de un 45 por ciento de la capacidad de refinación de crudo del país, según la EIA. (Con información de Reuters)