Mipymes pierden competitividad en 10 años
La política para impulsar a las mipymes en la última década no cumplió su cometido, en tanto que las micro y pequeñas empresas están desvinculadas de las cadenas productivas, registran un alto porcentaje de mortalidad y una limitada capacidad tecnológica y productiva, dijo Ricardo Carrillo, director de la consultora ARegional.
Estos problemas son consecuencia de la falta de esquemas de financiamiento eficientes que permitan a las pequeñas compañías invertir en capacitación e innovación, comentó Maritza Rosales, directora de pymes en ARegional.
Estas limitantes ocasionaron que las mipymes perdieran competitividad y en una década experimentaron una reducción de -3.4% en su capacidad para generar valor agregado en sus procesos y productos, y redujeron -17.7% sus remuneraciones a trabajadores.
Una década fallida
En 2002 se publicó la Ley para el desarrollo de la competitividad de la mipyme, la cual colocó a la Secretaría de Economía (SE) como el organismo coordinador, y en ocasiones ejecutor, de programas y proyectos enfocados a fomentar la creación de empresas y apoyarlas en su viabilidad, productividad, competencia y sustentabilidad.
La SE era la encargada de coordinar a otros organismos como NAFIN, Bancomext, Focir, Fira y Conacyt, entre otros, sin embargo, la falta de coordinación entre los otros organismos involucrados, así como la desvinculación de los diversos programas y apoyos limitó los resultados.
El fondo pyme, por ejemplo, se diluyó en garantías a los bancos, la realización de ferias que poco aportaron a la competitividad de las empresas e incluso llegó a trasnacionales.
De los 6,000 millones de pesos (mdp) anuales que se destinaron a fondo pyme durante el sexenio calderonista, 40% iba a garantías, 7% se gastó en ferias y eventos promocionales, y 13% se dio a grandes empresas trasnacionales so pretexto de proyectos de encadenamiento productivo, dijo Flavia Rodríguez, subdirectora general técnica de Aregional.
Los programas de Conacyt enfocados a fomentar la innovación dentro de las mipymes, como Innovapyme o Proinnova, también fueron insuficientes. Actualmente solo 1% de la patentes que se solicitan en México provienen de mipymes, mientras que en otros países como China representan 66%, dijo y Anne Croguennec, analista de Areginal.
Reajustar la estrategia
Rodríguez hizo un llamado al nuevo gobierno para no incurrir en los mismos errores de los sexenios anteriores y diseñar una estrategia integral para incrementar la competitividad de las mipymes. “Se trata de diseñar una política industrial sectorial e insertar a las pequeñas empresas en las cadenas productivas”, dijo.
La actual administración, a cargo de Enrique Peña Nieto, ya ha reajustado algunas estrategias, al menos en el discurso.
A principios de año, Enrique Jacob Rocha, subsecretario para la pequeña y mediana empresa de la SE, anunció ante medios de comunicación una reingeniería de la política para impulso a mipymes. Por ejemplo, se creó el Instituto Nacional del Emprendedor a fin de tener un ente especializado en pymes que tenga autonomía de gestión.
“Hasta el momento se trata de cambios en la forma, falta ver si eso se va a traducir en un cambio de fondo”, dio Rosales.
Mipymes en cifras
- Representan 99.6% del total de las unidades económicas.
- Crean 67.1% del empleo
- Participan con 29.7% de la producción
- Generan 35.4% de las remuneraciones totales