Agroparques, ¿estrategia al precipicio?
Nota del editor: La versión completa de este artículo lo puedes consultar en la edición 256 de la revista Manufactura, Especial Promesas de la Ingeniería Mexicana, correspondiente a abril de 2017.
La estrategia federal que apostó a desarrollar clústers agropecuarios se encarrila al olvido. El Sistema Nacional de Agroparques desapareció formalmente del presupuesto 2017 tras incorporarse al programa de Productividad Agroalimentaria como parte de las restricciones al gasto.
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En 2016 ambos programas tenían recursos por 1,718 millones de pesos (mdp), de los cuales 460 mdp eran para agroparques. Con la fusión tendrán 1,315 mdp, lo que “afectará al monto y beneficios para productores e industriales interesados”, advierte Martín Corral, productor agropecuario de Sinaloa.
Las restricciones al gasto federal de los dos años anteriores ya habían afectado esta estrategia que arrancó en 2014 con 32 beneficiarios de los distintos apoyos. Para 2015 aumentaron a 40 y un año después bajaron a 25.
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Durante su breve existencia, el gobierno recortó los apoyos y modificó las reglas de operación del Sistema de Agroparques. En 2014 y 2015 ofrecía hasta 250 millones de pesos (mdp) para desarrollo integral, pero en 2016 y 2017 eliminó ese aspecto y dejó solo el apoyo para infraestructura básica por 100 mdp.
Desértico panorama
La Secretaría de Agricultura concibió los agroparques en 2013 a partir de un proyecto elaborado por especialistas holandeses. Son clústers de logística e infraestructura en los que empresas con distinta vocación agropecuaria acopian, producen y comercializan productos. Puede ser carne u hortalizas.
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La meta era crear y fortalecer con infraestructura 16 agroparques. Pero a la fecha solo hay seis en distintas etapas (en Chiapas, Durango, Michoacán, Morelos, San Luis Potosí y Veracruz), y en Aguascalientes comenzó la construcción de uno más. Para ellos, el gobierno dispuso de un presupuesto de 1,313 mdp entre 2014 y 2016.
Este año compartirán recursos del programa de Productividad Agroalimentaria, bajo el título de Activos Productivos y Agrologística, que tiene un presupuesto asignado de 1,315.49 mdp.
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“El agroparque, aún con los subsidios, requiere de mucha inversión que solo está al alcance de grandes productores”, afirma Sergio Márquez-Berber, investigador de la Universidad Autónoma Chapingo.
Sería mejor utilizar estos recursos, dice, en otro tipo de cadenas de valor que beneficien a más productores.