México está en la antesala de crear un mercado legal de la marihuana
México se plantea abrirse al mercado legal de la marihuana —para fines lúdicos, médicos y comerciales—, que ya deja ganancias millonarias en Estados Unidos y Canadá, y que puede atraer nueva inversión extranjera.
La semana pasada, Olga Sánchez Cordero, senadora de Morena y próxima secretaria de Gobernación, presentó la Ley General para la Regulación y Control de Cannabis, que planea establecer un modelo de regulación legal estricta del cannabis, desde su siembra hasta su venta y comercialización.
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La iniciativa aún debe ser aprobada, pero puede abrir la puerta a un mercado millonario y supondrá el fin de la política prohibicionista de esta sustancia que ha regido durante décadas.
“Estamos llegando tarde, pero es importante que nos demos cuenta de que es una oportunidad de enorme relevancia para México y para el mundo. Estamos sentando las bases para una despenalización de los derechos humanos y somos un país clave en la red de narcotráfico creada por una política prohibicionista absurda”, comenta Alejandro Madrazo, investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), quien añade que el país tiene las bases para construir una industria desde cero y evitar monopolios.
Un mercado identificado
El potencial mercado es grande: alrededor de 7.3 millones de mexicanos de entre 12 a 65 años fumaron marihuana más de una vez durante 2016, según la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco realizada por la Secretaría de Salud.
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Asimismo, el Reporte Mundial de Drogas de 2018 —elaborado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés)— destaca que México es el segundo país con mayor cantidad de hierba de cannabis incautada en todo el mundo en 2016, según las últimas cifras disponibles, con 841 toneladas (18% de toda la hierba de cannabis incautada en el mundo), después de Estados Unidos, con 978 toneladas (21%).
“Si bien en 2016 se reportaron aumentos en el cultivo doméstico de cannabis en Estados Unidos, México siguió siendo la fuente extranjera más importante de hierba de cannabis”, detalla el documento.
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La superficie total de cultivo de marihuana en México es de 114,360 hectáreas, con Sinaloa como mayor productor, con 36% del total; seguido por Chihuahua, con 19.5%, y Durango, con 16.4%, según el documento 'El mapa de cultivo de drogas en México’, publicado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Oportunidad de negocio
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitió la semana pasada un marco para que el Gobierno de México forme un mercado de cannabis con licencia para los residentes en el país.
Es una gran oportunidad para empresas internacionales como la canadiense Khiron Life Science, que tiene tiempo de estudiar el mercado de la marihuana en México.
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“Con el anuncio (de la Cofepris) estamos viendo gradualmente el paso hacia un marco muy necesario para el cannabis legalizado en México. Esto es algo que he defendido durante mucho tiempo: es bueno para los negocios, para el rubro de salud y, lo que es más importante, para el tejido social de nuestro país”, dijo Vicente Fox, expresidente de México y miembro del consejo de Khiron.
El mercado de la marihuana medicinal tiene un valor potencial de 2,000 millones de dólares (mdd) para los próximos 10 años, según estimaciones de KPMG.
¿Preferencias a empresas extranjeras?
Emma Rodríguez, integrante de la asociación de estudiantes Por Una política Sensata de drogas en México, comenta que estos lineamientos de la Cofepris pretenden abrir la puerta a empresas consolidadas en otros países, sin tener en cuenta el nicho de negocios que pueden crecer internamente.
“Por eso creo que debemos de tener el monopolio estatal, que después se pueda fragmentar y privatizar. Pero si empezamos con un mercado comercial, es probable que en poco tiempo tengamos una industria muy poderosa con capacidad de capturar al regulador y eso sí seria muy grave, no solo para la marihuana, sino para el esfuerzo de regular y mejorar la política de drogas en general”, advierte Madrazo.
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El académico también destacó que es importante formalizar a los campesinos y distribuidores que trabajan en el mercado ilícito.
La iniciativa de ley de Sánchez Cordero, que puede ser aprobada en diciembre, plantea la creación de clubes o cooperativas de cannabis donde los socios puedan producir marihuana para uso personal, con un límite planteado en 480 gramos al año por socio.
