Escasea proveeduría energética nacional
El paquete de leyes secundarias en materia energética propone que en los nuevos contratos petroleros tengan un promedio mínimo de 25% de contenido local a más tardar en 2025. Lograr esta meta, sin embargo, será difícil pues hoy en día no hay una cadena de proveeduría integrada, opinó Gilberto Ortiz, presidente de la rama industria petroquímica de la Canacintra.
Una vez que se apruebe la legislación secundaria y se lancen las primeras licitaciones, los especialistas coinciden en que se crearía un esquema operativo similar al de la industria automotriz, donde en un primer momento los proveedores nivel 1 serían los grandes conglomerados trasnacionales, mientras que las empresas mexicanas tendrían un rol parecido al de los proveedores nivel 2 y 3.
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Desde hace varios años, trasnacionales como la suiza-sueca ABB, las francesas Schneider y Alstom, y las estadounidenses Eaton y General Electric abastecen de infraestructura y tecnología a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Cuando se lanzó la iniciativa de reforma energética, en agosto del año pasado, estas empresas hablaron de expandir sus operaciones en México si es que se detonaba una demanda por parte de nuevos jugadores, tanto en el sector de petróleo y gas como en el eléctrico.
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Lograr estas expansiones con un promedio mínimo de 25% de contenido local a más tardar en 2025 requerirá de un amplio trabajo de desarrollo de proveedores, en tanto que las empresas mexicanas actualmente no están listas para cumplir con el volumen, exigencias y calidad que demandaría este mercado. “Sobre todo hay que trabajar en la capacitación”, dijo Ortiz.
Eaton, por ejemplo, tiene 25 fábricas en el país y trabajó varios años para desarrollar una base de proveedores locales que a la fecha están capacitados para desarrollar soluciones especiales para sus productos, dijo Andrea Pérez de Ramer, directora de mercadotecnia y comunicación de la división de calidad de energía para México de la compañía, en una entrevista realizada a mediados del año pasado.
Para las medianas y pequeñas empresas la oportunidad está en insertarse como proveedores a lo largo de toda la cadena de valor, con servicios y productos tan específicos como una válvula, un herramental o alguna parte metalmecánica. Sin embargo, Ortiz consideró que más allá de establecer metas de proveeduría en porcentajes y años, hay que delinear estrategias claras y puntuales para integrar la cadena.
