'Florece' la producción de frutas de temporada
La primavera y el verano son las estaciones del año que concentran la mayor variedad de frutas y verduras, lo que permite un mayor consumo de las mismas con las ventajas de tener precios más accesibles, mejor calidad y al estar frescas el sacarles el mejor provecho.
En primavera una característica general de los productos del campo es que son: fuentes ricas en líquido, fibra y antioxidantes.
Por ejemplo, la cebolla contiene vitaminas A, B1, C y E; calcio, magnesio, hierro, fósforo, que entre otros beneficios ayuda a abrir las vías respiratorias en especial para las personas que padecen alguna alergia.
La calabazas verdes son ricas en vitamina A y C; potasio, hierro y zinc, ayudan a evitar infecciones respiratorias, fortalece la formación de anticuerpos, glóbulos rojos y blancos y mejora la trasmisión y generación del impulso nervioso y muscular.
Las zanahorias poseen beta caroteno, sustancia que se convierte en vitamina A en el cuerpo humano y fuerte antioxidante que ayuda en el combate de algunos tipos de cáncer, como el de pulmón, puede proteger contra infartos y enfermedades cardíacas.
Entre las frutas primaverales destacan las cerezas contienen una gran cantidad de agua, así como también son un aporte de fibra, hidratos de carbono, lípidos y proteínas.
Contienen antioxidantes, llamados antocianinas, que ayudan en la reducción de enfermedades cardíacas y cáncer, y melatoninas que facilita la regulación del ritmo cardíaco y los ciclos de sueño del cuerpo; incluso puede ayudar en la prevención de la pérdida de memoria.
Los nísperos son fuente de calcio, fósforo, el magnesio, el azufre y el hierro, además de un alto contenido de agua, por lo que se recomienda a personas con altos niveles de ácido úrico o gota
Las ciruelas son apreciadas por su alto contenido de fibra, que ayuda en la regulación del aparato digestivo y reducción del colesterol; fortalece el sistema inmunológico y reduce el ritmo del envejecimiento del cuerpo y contribuye a la prevención del Alzheimer.