El talón de Aquiles de la industria médica mexicana
La industria de dispositivos médicos en México goza de buena salud, ya que crecerá a un ritmo de 6.4% anual durante los próximos cinco años, superando a países como Estados Unidos, Alemania y Suiza. Sin embargo, el reto será pasar de la maquila a la fabricación de productos propios, coinciden integrantes del sector.
“Necesitamos empezar a expandirnos en investigación y desarrollo, crear productos y ventas directas desde aquí”, menciona Miguel Ángel Felix-Díaz, director de Ensambles de Calidad México (Encamesa), empresa maquiladora especializada en ensamble y empaque de productos como micropipetas (usadas para muestras clínicas), equipo de terapia para rehabilitación y mangas de hule.
La industria de los dispositivos médicos en México está compuesta principalmente por pequeñas y medianas empresas, y a pesar de que se ha demostrado un alto desempeño en los procesos de manufactura, aún falta mucho por desarrollar en cuanto a equipos más avanzados y con un mayor nivel tecnológico, de acuerdo con el artículo 'Investigación y desarrollo para la innovación y mejora de dispositivos médicos', de PwC.
El reto está en la vinculación del sector privado con el gobierno, las universidades y los hospitales, para que las empresas puedan hacer inversión a gran escala, puntualiza Ángel De la Campa, presidente del clúster de productos médicos de Baja California.
El sector de proveedores de servicios de salud en México tuvo un valor de 76,900 millones de dólares (mdd) en 2013, con una Tasa Media de Crecimiento Anual (TMCA) de 6.5%, entre 2009 y 2013.
La expectativa para 2018 es que el valor aumente 34.5%, es decir, unos 103,400 mdd, de acuerdo con el reporte de la Industria de Dispositivos Médicos en México, elaborado este año por la Secretaría de Economía (SE) y ProMéxico.
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