FOTOGALERÍA: Jaguar, un auto hecho por sastres

Los 1,500 modelos Jaguar-Land Rover que se vendieron en México el año pasado tienen algo diferente al resto de los autos que se comercializaron en el país: la piel del tablero y asientos fue cortada y cosida por un sastre que trabaja dentro de la planta de Merseyside, Inglaterra.

Procesos artesanales dentro de una planta ensambladora es algo casi impensable en una industria dominada por la automatización, sin embargo, la marca del jaguar encontró en lo artesanal un valor agregado.

Nuestro objetivo es mantenernos como una marca aspiracional. Mientras las otras firmas de lujo apuestan por el volumen, con modelos más chicos, austeros y cada vez más baratos, nosotros nos enfocamos en mantener la calidad y exclusividad de nuestros materiales y diseños, dijo Joseph ChamaSrour, director general de Jaguar y Land Rover en México.

Esta filosofía permitió a la armadora ‘reconquistar’ a sus consumidores y apuntalar sus ventas a nivel global. Tan sólo en 2013, los ingresos de las marcas Jaguar-Land Rover sumaron 4 mil millones de dólares (mdd) , casi el doble de lo que el Grupo Tata pagó a Ford por las dos marcas en 2008 (2 mil 300 mdd).

Actualmente la armadora vive una ‘Range Rover manía’ en tanto que los pedidos de la nueva versión de la SUV ha sobrepasado la capacidad productiva de la planta. Tan sólo en México hay una lista de espera de seis meses, detalló ChamaSrour.

Un jaguar ruge en México

La diferenciación lograda a partir de procesos artesanales y de la calidad y exclusividad de los materiales, permitió a la marcas inglesas sobrellevar la caída de -11.7% que sufrió el segmento de autos de lujo durante el primer bimestre del año.

La armadora comercializó mil 500 unidades de Jaguar y Land Rover en el país durante 2013, cifra 44% superior a la obtenida en 2012. Gracias a este crecimiento, Land Rover obtuvo el primer lugar en ventas del segmento premium el año pasado, en tanto que Jaguar se colocó en el tercer puesto.

El Distrito Federal representa 45% de las ventas de la marca, seguido de Guadalajara, Monterrey, Puebla y Mérida. El catálogo incluye tres modelos de Land Rover, tres de Range Rover, y cuatro de la gama Jaguar, el XF, XJ XK y el convertible F Type.

Entre los clientes figuran las 150 personas más influyentes del país, aquellos que pueden pagar más de 170 mil dólares (2 millones 246 mil 635 pesos) por un modelo de la marca oficial de la realeza inglesa.

Para este año la firma buscará mantener cautivos a sus clientes en México con las nuevas versiones de la Ranger Rover y la Range Rover Sport, cuyas carrocerías de aluminio son hasta 400 kilos más ligeras que las de las generaciones anteriores, detalló ChamaSrour.

Ambas versiones estarán disponibles en dos motorizaciones, un V6 supercargado (340 caballos) y un V8 supercargado (510 caballos).

A mediados de año llegará a México la versión Coupé del Jaguar F-Type, cuyo precio arrancará en 90 mil dólares y se podrá pedir por Internet. “Estamos trabajando en un sitio web para que los clientes ordenen su vehículo a la medida, en los colores, rines y tipo de piel que prefieran”, dijo ChamaSrour.