Cumbre climática apunta de nuevo a energías renovables
La cumbre de Naciones Unidas sobre el cambio climático acordó ampliar el uso de energías renovables y recaudar miles de millones de dólares en asistencia a países en desarrollo, en un esfuerzo por incrementar las posibilidades de un acuerdo a gran escala para desacelerar el calentamiento global.
La cumbre de un día, presidida por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, establece objetivos para detener la pérdida de bosques tropicales para 2030, mejorar la producción alimenticia y elevar la cuota de vehículos eléctricos compartidos en ciudades hasta 30% de las ventas de vehículos nuevos para 2030.
Las iniciativas no vinculantes fueron fijadas el martes por varias coaliciones de gobiernos, compañías multinacionales, ciudades, grupos financieros, inversores, organizaciones ecologistas y otros grupos.
Los objetivos pretenden ayudar a preparar una cumbre de 200 naciones en París a fines de 2015 para concluir un acuerdo que ayude a frenar las emisiones de gases de efecto invernadero. Hasta ahora, el trabajo ha sido lento, con muchos países más centrados en mejorar su crecimiento económico y crear empleos.
Los gobiernos y los inversores dijeron que recaudarían más de 200,000 millones de dólares en financiación para el clima para finales de 2015, incluidos 30,000 millones en bonos verdes de bancos comerciales y 100,000 millones de un grupo de bancos de desarrollo.
"Esto servirá como un catalizador para finalizar un acuerdo universal y significativo en París sobre cambio climático en 2015", dijo Ban acerca del dinero.
Naciones Unidas dijo que las promesas de apoyo financiero darían un "impulso significativo" a la promesa de las naciones ricas en 2009 para recaudar 100,000 millones de dólares al año, para 2020, de todas las fuentes para ayudar a los países pobres a cambiar a energías renovables y adaptarse a las olas de calor, sequías y el aumento del nivel del mar.
Por otro lado, una alianza de unos 30 países, incluido Estados Unidos y una coalición de compañías multinacionales, fijaron el objetivo de reducir a la mitad las pérdidas de bosques para 2020 y detener la pérdida para 2030.
Si fuera totalmente implementado, esto evitaría entre 4,500 millones y 8,800 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono al año, equivalente a las emisiones de los 1,000 millones de coches del mundo.
Los árboles absorben dióxido de carbono del aire cuando crecen y lo liberan cuando mueren. La quema de bosques desde la Amazonía hasta el Congo, principalmente para dejar lugar para los cultivos, supone hasta una quinta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por los humanos.
Empresas como Walmart, Unilever, Wilmar International, General Mills, Asia Pulp y Paper y Nestlé, muchas organizaciones no gubernamentales y grupos de pueblos indígenas han firmado el plan.
La declaración está respaldada por más de 1.000 millones de dólares de países como Gran Bretaña, Alemania y Noruega, que dijo que aportaría hasta 300 millones de dólares a Perú y 150 millones de dólares a Liberia.
"Las acciones aprobadas hoy reducirán la pobreza, incrementarán la seguridad alimentaria, mejorarán la aplicación de la ley, asegurarán los derechos de los pueblos indígenas y beneficiarán a las comunidades de todo el mundo", dijo Ban. (Con información de Reuters)