Autopartes usadas inundan mercado mexicano
Los fabricantes de autopartes denunciaron un incremento en la comercialización de piezas de segunda mano, las cuales se obtienen de los vehículos viejos que llegan a los deshuesaderos y se venden a precios 10 veces inferiores a los de una pieza nueva, dijo Oscar Albin, presidente de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
Las partes que se recuperan de los vehículos usados son transmisiones, motores, suspensiones, direcciones y sistemas de enfriamiento, las cuales se venden en los mismos deshuesaderos y se usan para otros autos viejos.
Quien tiene un auto usado modelo 87, por ejemplo, difícilmente va a invertir en una transmisión nueva de 20,000 pesos. Lo más probable es que vaya a un deshuesadero y compre una usada, de un modelo similar al suyo, explicó Albin en el marco del encuentro “Diálogo con la industria automotriz”.
Si bien son piezas muy baratas, su tiempo de vida útil es limitado, ya que se obtienen de vehículos que en promedio tienen un kilometraje de 160,000 a 200,000.
El líder de la INA atribuyó el crecimiento del mercado de autopartes usados a las importaciones de autos de segunda mano provenientes de Estados Unidos, las cuales ascendieron a poco más de 458,000 unidades en 2012, según datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Piratería, el otro problema
La piratería es otro problema para la industria de refacciones originales, denunció el presidente de la INA.
“Los distribuidores de refacciones venden cinco refacciones clonadas (o piratas), por una original”, dijo Albin. Principalmente es un tema de costos, ya que la copia vale cinco veces menos que la original, sin embargo, dura 10 veces menos.
Las piezas más clonadas son partes de uso frecuente como baterías o pastillas de freno.
“Estamos investigando para tomar acciones concretas contra la piratería de marcas”, aseguró Albin.