Kodak resurge gracias a la industria gráfica
En los primeros días de 2012, parecía que todo había terminado para Kodak al declararse en bancarrota, sin embargo, nadie imaginó que mucho antes de que finalizara este 2013, la empresa pionera de la fotográfica anunciaría su reestructura con la idea de dedicarse por completo a la industria gráfica.
El 19 de enero de 2012, Eastman Kodak Co presentó su solicitud de protección de bancarrota ante los tribunales del estado de Nueva York y pidió tiempo a sus acreedores para pagar sus deudas.
El hecho de quedar bajo la protección del capítulo 11 de la ley estadounidense, ayudó a focalizar sus futuros negocios en la industria gráfica, comentó Gustavo Oviedo, presidente y director general para América Latina de Kodak.
Así, en 2012, la firma acordó vender sus patentes de imágenes digitales en una operación valuada en 525 millones de dólares a un consorcio liderado por Intellectual Ventures y RPX Corp. Este fue un paso clave para poner fin a su condición de bancarrota.
Durante el proceso de emergencia, la empresa decidió centrarse en servir a la industria gráfica en países emergentes, principalmente en el área de empaques y pre prensa para impresión comercial, para el segmento de periódicos (prensas e insumos), y en el área de impresión digital donde los usuarios finales serían periódicos, comercial printing, burós de servicios y diseñadores de marca.
En septiembre de 2013, la compañía anunció su salida de la protección de bancarrota para continuar con sus negocios en la industria gráfica, pues logró que un juez federal de Nueva York aprobara el plan para salir de la suspensión de pagos declarada en enero de 2012, lo cual representaba el último paso para completar el proceso de reestructuración de la firma.
“Lo importante para transformar a una empresa de 120 años en un nuevo negocio son dos cosas: la importancia de entender a la clientela a la que se dirige y entender a la gente que pertenece a Kodak en el mundo”, apuntó en entrevista Oviedo.
Kodak salió de la suspensión de pagos con un total de 8,500 empleados, luego de contar con 17,000 cuando se colocó bajo la protección del capítulo 11 de la ley estadounidense en enero de 2012.