Controversia por el nuevo etiquetado
Las reglas de etiquetado de alimentos y bebidas que publicó la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) estarían hechas a modo para los productores de los mismos, ya que se trata de etiquetas poco entendibles para el comprador y que ocultan el contenido de azúcares añadidos, dijo Alejandro Calvillo, director de la asociación Poder del Consumidor.
A decir de Calvillo, la nueva forma en la que las empresas presentarán el contenido calórico de sus productos no eñala otras fuentes de azúcares, con lo que se evita la reformulación de los productos con alto contenido calóricos y promueve que los productos se mantengan en las condiciones actuales.
Por esta razón, el pasado 15 de abril la agrupación Poder del Consumidor, junto con la Fundación Interamericana del Corazón en México, se ampararon en contra del etiquetado de alimentos y bebidas emitido por la Cofepris.
Hay que recordar que en septiembre de 2013 se propuso el nuevo impuesto por uso de azúcares y que a raíz de la puesta en marcha de este gravamen se estima el descenso de 2% en el consumo de este insumo en México hacia el cierre de 2014.
Las quejas
No obstante, para grupos civiles el impuesto y el cambio de etiquetado no son suficientes. Las organizaciones reclaman que el etiquetado no es entendible para la mayor parte de la población. También alegan que los criterios del nuevo decreto se contraponen con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de los criterios de Estados Unidos y de la Estrategia Nacional contra la Obesidad y la Diabetes.
Ambos grupos piden la reconsideración de la Secretaría de Salud sobre el etiquetado y dar marcha atrás a lo establecido. Solicita la creación de un grupo técnico de trabajo que avale el nuevo etiquetado y la creación de un semáforo en la etiqueta que señale el contenido de azúcar. Por ejemplo, que el rojo indique un alto contenido calórico, el amarillo medio y el verde, poco o nada.
De acuerdo con Calvillo, las reglas de etiquetado de la Cofepris están basadas en los mismos criterios que del GDAs en Europa en el que las empresas gastaron mil millones de euros para bloquear la opción del semáforo en las etiquetas.
Los nuevos lineamientos marcan que el consumo diario de azúcar sea de 90 gramos (18 cucharadas cafeteras). Sin embargo, el criterio de la OMS es de 50 gramos como máximo tolerable, pero no como recomendación de ingesta diaria.
La semana pasada la Cofepris publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) las reglas sanitarias en materia de etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas en las que se obliga a las empresas productoras a incluir en el etiquetado frontal de sus productos su información nutrimental.
Por su parte, en un comunicado, la Secretaría de Salud aseguró que las nuevas reglas no promueven el consumo de azúcares, sino que buscan transparentar el contenido nutrimental de alimentos y bebidas para que los consumidores tomen las mejores decisiones alimentarias.
La industria en general, opta por endulzantes alternativos para aminorar la carga calórica de los alimentos y bebidas que produce. La Sociedad Mexicana de Nutrición y Endocrinología detalla las características de algunos educurantes alternativos. Léalas aquí.
