Producir nanofibras al estilo francés
A base de innovación y desarrollo tecnológico, Lyon (Rhône-Alpes) se posicionó como la región textil líder en Francia y actualmente genera 65% de toda la producción industrial francesa de telas (más de 300,000 toneladas), 12.5% de la producción europea y 70% de la facturación nacional (2,000 millones de euros), según información del organismo.
El secreto detrás de este crecimiento, es el clúster de Techtera, el cual se constituyó en 2005, con 40 laboratorios y centros de formación, 140 empresas, 40 pymes, que sumaban 10,000 empleados. El objetivo de la organización era fomentar la competitividad del sector a través de la innovación.
Entre 2009 y 2012, el clúster trabajó en dos flancos, por un lado en recuperar la capacidad de innovación de las empresas a fin de generar materias primas con valor agregado, y por el otro en fortalecer la multifuncionalidad de los textiles incorporando tecnología que los dotara de ciertas cualidades.
La estrategia funcionó y en poco tiempo este cluster desarrolló la capacidad de diseñar y fabricar de textiles técnicos y funcionales, con propiedades específicas, como alta resistencia, retardantes, antimicrobianos, a prueba de agua y anti rayos ultravioleta. Desde su fundación a la fecha, el cluster ha apoyado 8 proyectos, según datos del Techtera.
Oportunidad para México
La industria textil mexicana también tiene una gran oportunidad en la nanotecnología para agregar valor a sus productos y recuperar competitividad. Las nanofibras facilitan la manufactura de prendas con valor agregado, como ropa deportiva anti-olor, gabardinas impermeables o pantalones repelentes a manchas, así como ropa especializada como uniformes industriales o de bombero retardantes al fuego o chalecos anti balas.
Este sector cerró el primer trimestre una producción equivalente a 12,579 millones de pesos (mdp), apenas 0.27% más que en el mismo periodo de 2013, según datos del Banco de México (Banxico).
