La bisagra del Triángulo del Sol
Era un pueblo de pescadores, llamado Zihuatanejo. Corrían los años 70 y gobierno e inversionistas encontraron que los alrededores de este sitio, a tres horas del puerto de Acapulco, era una joya del Pacífico. Así fue como decidieron construir el desarrollo turístico llamado Ixtapa.
Y así fue, también, como surgió ese binomio paradisiaco que surge cuando se habla de posibilidades vacacionales en destinos de playa mexicanos: Ixtapa-Zihuatanejo.
Sus playas
La región posee 30 kilómetros de playas con oleaje diverso para todos los gustos, lo que permite la práctica de deportes acuáticos como el surf o esnórquel. En Ixtapa destaca El Palmar, simplemente la más conocida por tener una importante zona hotelera y espectaculares atardeceres.
Por el fuerte oleaje, Las Escolleras es ideal para la práctica de surf. Playa Quieta hace honor a su nombre con un oleaje moderado debido a que se encuentra localizada frente a la Isla Ixtapa, a la que se puede acceder en lancha y disfrutar de pescados y mariscos frescos en Playa Cuachalalate; el paseo a pie en Playa Coral se vuelve una recomendación para luego sumergirse en sus aguas y bucear o practicar esnórquel.
En Zihuatanejo, Playa La Ropa ofrece descanso y deliciosos restaurantes, y Playa Las Gatas –con aguas cristalinas y escaso oleaje– es un espacio íntimo, ya que su acceso es únicamente por mar.
Las actividades
VisitePlaya Linda y disfrute del cocodrilario con ejemplares de todas las edades, una buena oportunidad para ver los reptiles en su hábitat natural.
Park Bio, en Zihuatanejo, ofrece un recorrido para ver diferentes especies de insectos, un jardín botánico, una cascada de 37 metros, un santuario de iguanas y apreciar diversos animales mamíferos en libertad desde lo alto de un puente.
Parque Aventura es de adrenalina y diversión con tirolesas de hasta 30 metros de altura. Adventours realiza excursiones ecológicas con paseo en bicicleta por la selva, kayak en el mar y buceo libre en arrecifes de coral.
Disfrute los ecosistemas de Ixtapa a través de un tour en ATV (cuatrimotor) y recorre la selva o una playa virgen. Para documentarte sobre la historia de la región, visita el Museo Arqueológico de la Costa Grande.
También hay actividades para disfrutar de la naturaleza. La pesca es una de ellas, pero con un enfoque sustentable: compañías, en apoyo a la ecología, sugieren a sus visitantes el método catch and release, que consiste en liberar la presa para recuperarse y continuar su reproducción.
La biodiversidad de la zona facilita la observación de aves. También se disfruta el espectáculo natural de liberar tortugas: los hoteles del lugar ofrecen esta experiencia.
Zihuatanejo
Hay varias versiones sobre el origen del nombre de este lugar, la más popular indica que su nombre proviene del náhuatl Zihuatlán que significa “tierra de mujeres”. Sus primeros pobladores, los cuitlatecos, se destacaron por ser un pueblo agrícola productores de algodón, cacao y maíz.
Durante el tiempo de la Colonia, el puerto de Zihuatanejo tuvo cierta importancia, de una de sus playas salían embarcaciones con maderas finas y se cargaba el barco en la hoy conocida Playa La Madera. La Playa La Ropa tomó su nombre de un naufragio de un barco que transportaba sedas finas de Filipinas cuando la marea arrastró el cargamento hasta aquella playa. Es un pueblo pescador lleno de encanto mexicano, con calles empedradas, techos de teja y la falta de edificios altos le dan un aspecto tradicional. Cada año, llegan a su bahía alrededor de 60 cruceros provenientes de México y el extranjero.
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