Oriflame apuesta por una logística sin fallas
El gran reto de la venta de productos por catálogo está en adaptarse a las necesidades de los clientes. Así lo concibe Oriflame, compañía de origen sueco, especializada en el negocio de venta directa de productos de belleza y cuidado de la salud (wellness), que ve a México como el mercado premium de América Latina.
Para destacar entre los más de 45 distribuidores de cosméticos que hay en el país, Oriflame focaliza estrategias logísticas que le permiten entregar productos en tiempo y forma, sin caer en falsas promesas de entrega inmediata.
Por ello, cuenta con suficiente stock en bodegas regionales, lo que le ha permitido cambiar las reglas de entrega de producto ‘en el tiempo acordado’, sin sacrificar el precio.
Los productos se distribuyen a través de un sistema de marketing multinivel, para que la compañía pueda vender directamente al consumidor a través de afiliados.
“Nuestra proveeduría cuenta con un sistema de costo muy eficiente”, aseguró Jesper Martinsson, director de Operaciones para Latinoamérica de Oriflame.
Las socias, dijo, no compran un gran pallet de labiales, sino dos fragancias, dos maquillajes o cinco desodorantes y el flete de esa orden tiene que ser pequeño con relación al valor de la orden, “ahí está la clave”.
“Consolidar varias órdenes y enviarlas todas juntas a un lugar de servicio hace que el precio por orden sea muy bajo y eficiente”, asentó el directivo.
Eficiencia en costos
“El costo de entrega del producto es de 5% del valor del producto y cuidamos que se mantenga”, dijo Martinsson, aunque la expectativa es bajar el porcentaje. “Estamos trabajando en una mayor consolidación de producto: entre más tiempo espere el distribuidor habrá mejor precio, tanto para él como para la compañía. Nuestra promesa vale más que la de nuestros competidores”, agregó.
Avon, por ejemplo, maneja catálogos semanales en los que el distribuidor puede comprar una sola vez, mientras que en Oriflame es posible hacerlo cuando y las veces que se quiera. Otros competidores hacen que los distribuidores compren en el lugar, donde dejan el producto para su distribución, en tanto que en Oriflame se puede comprar en diferentes lugares, gracias a su capacidad logística. “El costo podría ser más alto, pero no muchas veces más”, expuso el directivo.
La global desarrolla el 100% de sus productos en Suecia, y manufactura entre 60 y 70% en fábricas propias, ubicadas en Polonia, Rusia, India y China, mientras que el resto lo maquilan terceros que cumplen con los estándares de calidad señalados por la empresa.
Al llegar a México, los productos se alojan en bodegas ubicadas en Tlalnepantla, Estado de México o en Tijuana, Baja California para su distribución en centros de servicio y sucursales. “No tenemos flota propia; operamos con servicios de Estafeta y DHL como proveedores certificados y así es en todo el mundo”, dijo Santiago Salazar Yusti, director de Oriflame México.
La entrega es de 24 horas para la Ciudad de México y 48 horas promedio para el resto del país. “Antes la entrega se hacía el mismo día, era la tendencia, pero podía fallar, además de que la empresa no podía consolidar… ahora lo importante es la entrega en el tiempo acordado”, agregó Salazar Yusti.
