Industrias moribundas: El revelado de Kodak
Si alguien regresó del limbo para tener una segunda oportunidad, es Kodak; su división de imágenes personalizadas ‘reencarnó’ en Kodak Alaris, con un modelo de negocio distinto que ahora le ofrece una expectativa de crecimiento de 5%, impulsado principalmente por la impresión fotográfica.
Arturo Pérez, director comercial de Latinoamérica Norte de Kodak Alaris, explica que algunas tendencias tecnológicas como la impresión de imágenes en fotobooks, collages y en artículos como tazas o tarros fueron un aliciente para repuntar el segmento de la fotografía impresa, el cual se encontraba completamente deprimido hasta hace dos años.
“El consumidor busca hacer más con las fotografías que toma. Con el uso de tecnologías digitales, los consumidores han logrado apropiarse del control que antes tenía una persona especializada en un laboratorio fotográfico” comentó Pérez.
Kodak Alaris es el resultado de la compra por 650 millones de dólares que realizó un fondo de pensión inglés a Eastman Kodak Co. por los negocios de imágenes personalizadas e impresión de documentos. La operación incluyó el traspaso de 4,700 empleados a la nueva empresa y diversos centros de fabricación, el de Reino Unido, China, Estados Unidos, Brasil, India y Rusia.
El área más importante de la división de imagen personal —integrada por soluciones de quioscos fotográficos, papel fotográfico, productos de películas, servicios de fotografía digital para eventos y soluciones para parques temáticos— es la impresión fotográfica, que ha sido impulsada por el uso de cámaras digitales, smarphones, y tablets, según Arturo Pérez.
A diferencia de años anteriores, en los que revelar un rollo o imprimir una fotografía dependía de personal capacitado en el manejo de químicos y perfiles de color en un laboratorio, Kodak Alaris lanzó el concepto de la impresión seca, que no requiere químicos, que no deja residuos peligrosos y que es más amigable con el medio ambiente.
“Con el software que tienen los quioscos se hace un acoplamiento con el papel y se transmite la imagen. Lo único que se necesita es entrenar a una persona que haga un cambio del rollo de papel”, aseguró Pérez.
Según un estudio de BBC Research, la industria de la fotografía digital crece a ritmos de 3.8% por año y se estima que alcance un valor de 82.5 mil millones de dólares para 2016.
Mientras la industria de impresión de fotos lucha por su permanencia en el mercado, se estima que perderá cerca de 300 millones de dólares para 2016. De esta forma, el crecimiento del mercado está impulsado solamente por equipo fotográfico y sus accesorios (cámaras y lentes) que tienen una tasa de crecimiento anual del 5.8%.
