Ronda Uno es inmune al alicaído precio del petróleo
La Ronda Uno no ha perdido su potencial, pese a que los actuales precios del petróleo tocan niveles mínimos desde 2009. El gobierno de México puede seguir creyendo que su reforma energética es atractiva para atraer capitales privados.
Especialistas consultados coincidieron en que la crisis en los precios del crudo no afectará los negocios pronosticados para México, pues las empresas petroleras que tienen planes de invertir en el país están pensando en obtener rendimientos productivos a largo plazo, hacia los próximos cinco o 10 años.
Alfredo Álvarez, socio líder del sector energético para México y Centroamérica de Ernst & Young (EY), explicó que la primera licitación de la Ronda Uno comprende yacimientos en aguas someras, donde los costos de producción son relativamente bajos, por lo que las empresas que deseen participar podrían mantener márgenes de rentabilidad pese a los precios actuales.
Desde julio, los precios del petróleo han comenzado una época de vacas flacas, con mínimos históricos. Hoy, el referente internacional, el Brent, se situaba en 59 dólares, el menor nivel desde 2009. El jueves pasado, el precio de la mezcla mexicana de exportación finalizó en 53.72 dólares, una caída que empezó a generar cuestionamientos sobre la rentabilidad de los proyectos de exploración en aguas profundas.
La semana pasada, el gobierno mexicano publicó en el Diario Oficial de la Federación las bases de licitación para la primera fase de la Ronda Uno; en esta etapa serán 14 bloques de exploración y extracción de hidrocarburos en aguas someras frente a las costas de Veracruz, Tabasco y Campeche.
“En esas zonas es factible obtener petróleo a un costo de 10 o 15 dólares por barril”, agregó Alfredo Álvarez.
El gobierno planea licitar el resto de los 169 bloques de la Ronda Uno en un total de cinco etapas, que licitará paulatinamente a lo largo de 2015, las cuales incluirán zonas no convencionales, crudo extra pesado, y aguas profundas.
Torres-Barrón especialista de la práctica energética de la consultora Baker & McKenzie, opinó que esta caída en el precio del petróleo no será un factor que limite la participación de las empresas en la Ronda Uno, que incluye zonas en el proyecto de Chicontepec -de gran complejidad geológica- así como campos en tierra y aguas someras.
México tiene reservas estimadas en aguas profundas que superan en 28% a las reservas 3P (Probadas, Probables y Posibles) contabilizadas por Pemex en 43,000 millones de barriles.
A nivel mundial, las zonas o yacimientos de bajo costo se están acabando, y las petroleras están empezando a explorar zonas más complejas. Debido a esto, los procesos se encarecerán y esto llevará a un ajuste a la alza en los precios del petróleo en el mediano plazo, agregó Benjamín Torres-Barrón.
“Los proyectos de exploración y extracción de las grandes petroleras –como Exxon, Shell, British Petroleum o Chevron- tienen horizontes de entre 15 y 20 años. Entonces, más que basar sus planes de inversión en precios coyunturales, las empresas consideran tamaños de reservas, acceso a mercados o disponibilidad de infraestructura (por ejemplo ductos o gasoductos)”, dijo el especialista.
