La otra apertura del sector energético: las mujeres a puestos de dirección
CIUDAD DE MÉXICO.- La primera vez que Luz María Gutiérrez, directora general del grupo gasolinero G500 Network, tuvo la oportunidad de estar al frente de una empresa en el cargo de Director General entró en shock. La ejecutiva sabía que cumpliría el reto más importante de su vida, no solo en lo profesional sino en lo personal.
“Cuando uno busca un alto puesto debe saber qué es lo que quiere y hacia donde va, así como rodearse de un equipo que esté dispuesto a crecer, colaborar y transformarse. No se trata de llevar únicamente a la firma de un status a otro, sino también que el personal evolucione junto con ésta”, comenta la jefa de la marca gasolinera.
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La Agencia Internacional de la Energía (IEA por su siglas de inglés) reconoce que este sector industrial continúa como uno de los que menos diversidad de género tiene en la economía, a pesar de los esfuerzos recientes en el mundo para alentar la participación de las mujeres.
En el caso de México, la apertura de la industria energética —tras la reforma constitucional de 2013 en el sexenio pasado— contribuyó a la movilidad en los directorios de las empresas en beneficio de las mujeres.
La participación de la mujer en puestos de alto nivel creció en los últimos años dentro del sector energético y, aunque sigue existiendo desigualdad, ya hay cambios al respecto, como sucede en la esfera gubernamental, donde la cabeza de la Secretaría de Energía (Sener) es una mujer (Rocío Nahle)
En el momento presente, que coincide con el primer año de Gobierno de la administración de Andrés Manuel López Obrador —cuya política energética ha causado polémica por la suspensión de las rondas petroleras, entre otras medidas—, la jefa de G500 comenta que existe un panorama favorable para el sector de combustibles en México.
En este sentido, Luz María Gutiérrez está concentrada en trabajar arduamente para que la empresa consolide sus reservas estratégicas, en coordinación con la política energética del Gobierno federal.
G500 Network cerró 2018 con 320 estaciones de servicio en 21 estados del país y espera duplicar esta cantidad para el presente año.
Oportunidades, sí; desafíos, muchos
A nivel mundial, la proporción de empresas sin participación de mujeres en puestos de alta dirección descendió entre 2017 y 2018, al pasar de 34% a 25%, lo que significa que un mayor número de empresas tratan de establecer un equilibrio de género, conforme al estudio Women in Business: ¿cumplir o liderar? de Grant Thornton, empresa norteamericana de consultoría para el sector privado.
Luz María Gutiérrez es un ejemplo de mujeres que han sabido aprovechar esta coyuntura en México, sin embargo no ha sido sencillo.
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La empresaria ha enfrentado varios desafíos. Por ejemplo, cuando estuvo en Grupo Milano Melody, la firma se encontraba en plena transformación y con una apertura reciente hacia el mercado chino.
Asimismo, en Petro Seven, Luz María Gutiérrez debió asumir los cambios suscitados tras la reforma energética y actualmente como directora general en G500 se enfrenta a un modelo de negocio diferente en el segmento de midstream —transporte y almacenamiento de hidrocarburos— y con un plan robusto de expansión.
Lo más importante de mi carrera es que he tenido la fortuna de estar presente en mercados que se están abriendo, eso implica un enorme reto de responsabilidad pero con mucho aprendizaje a la vez
La industria y la intuición femenina
Con base en esta experiencia, la jefa de G500 considera que el mundo empresarial debe ser incluyente, ya que esta característica facilita la conformación equipos más preparados y multidisciplinarios, con nuevas ideas y tendencias. En su opinión, lo esencial no es ser mujer u hombre sino que ambos géneros sepan trabajar en equipo.
Sin embargo, Luz María Gutiérrez reconoce que cada quien tiene sus propias virtudes. Por ejemplo, la mujer posee un sexto sentido adquirido de forma natural —ya que biológicamente está preparada para la maternidad—, lo cual es una habilidad esencial dentro de las empresas industriales.