México y EU en peligro inminente por colapso de T-MEC
Al presidente estadounidense Donald Trump se le acaban las opciones para presumir "algún logro comercial" que le ayude en su campaña por la reelección presidencial y es que, a decir de expertos consultados por Expansión, tomar de rehén al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) por cuestiones migratorias carece de sentido y puede resultar peligroso para su país y para México.
“Tomar de rehén al TLCAN para tratar de resolver un problema migratorio no hace sentido y, además, pone en peligro lo que viene siendo la 'joya de la corona' de Trump en materia comercial”, aseguró en entrevista Kenneth Smith, exjefe de la negociación técnica de México para la renovación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN y que será sustituido por el T-MEC).
“Ya se le está colapsando la relación con China. El objetivo era privilegiar el T-MEC y obtener la aprobación, pero si no se ratifica el T-MEC, no le va a quedar nada”, agregó el especialista mexicano.
“Cuando Trump cierra las fronteras a China y pone una guerra de aranceles con China y luego lo hace con México, lo que está pasando es que le da un tiro en el pie a sus manufacturas” porque ningún país del mundo “puede producir todo lo que necesita”, dijo por su parte Manuel Molano, director general del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
“Si siguen por esta vía van a meter a su economía en una recesión bien complicada”, indicó.
Durante el fin de semana, el presidente estadounidense mantuvo ataques contra México vía Twitter: en uno de ellos dijo que no quería palabras sino acciones de su vecino del sur para detener la inmigración.
No es la primera vez que Trump realiza una amenaza de este tipo, por lo que es momento de ser prudentes y no especular, recomendó Moisés Kalach, integrante de Cuarto de Junto y coordinador del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales (CCENI) Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Kalach recordó que México ha construido una red de aliados en Estados Unidos.
“Es el momento de empujar esto para no llegar a esta posición. El costo de poner aranceles le va a pegar a la economía mexicana, pero también a América del Norte y a la competitividad en América del Norte”, advirtió el especialista.
“Hay que tomarlo como es: una amenaza en redes sociales, donde creo que no nos tenemos que enganchar”, agregó Moisés Kalach al tiempo de comentar que la oficina del CCE trabaja de forma permanente en Washington.
“Tenemos algunos aliados que, por fortuna han salido a apoyar: tenemos a Henry Cuellar, congresista demócrata de Texas; y al senador (Chuck) Grassley, del comité de Finanzas del Senado y es republicano”; además del sector privado estadounidense, subrayó.
Manuel Molano y Moisés Kalach coincidieron en que no se puede mezclar el tema comercial con la migración.
Violaciones
Si Estados Unidos cumple la amenaza de su presidente e impone aranceles del 5% a todos los bienes procedentes de México a partir del 10 de junio violaría disposiciones tanto del Tratado de Libre Comercio (TLCAN) vigente y de la Organización Mundial de Comercio (OMC), señaló Kenneth Smith.
Antes de imponer los aranceles, Estados Unidos tendría que justificar esta medida legalmente, invocando algún elemento en materia de seguridad comercial, explicó Kenneth Smith.
Si no lo hacen sería una violación de acceso a mercado, en conformidad con el TLCAN y violaría también en la OMC, porque los países se van comprometiendo a ir bajando sus aranceles a un nivel consolidado, que quiere decir que a partir de ahí ya no los puedes subir” detalló.
Los aranceles afectarían a los exportadores mexicanos, quienes venden cerca de 350,000 millones de dólares al año a Estados Unidos. Solo se salvarían de los nuevos aranceles el tomate y el azúcar porque están bajo un acuerdo de suspensión; el resto de las exportaciones estarían sujetas a los aranceles del 5%.
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Además del tuit de Trump, no ha habido un pronunciamiento formal de parte de la representación comercial de Estados Unidos hacia el Gobierno de México.
“No se puede estar jugando así con el futuro de un tratado tan importante para la región”, subrayó Kenneth Smith.
La respuesta
Aunque México puede reaccionar tal como lo hizo cuando EU impuso aranceles al acero y al aluminio –medida que terminó con el nuncio del presidente Trump el 17 de mayo-. Sin embargo, cuando se negoció el T-MEC, hubo un apartado especial “cartas paralelas respecto al concepto de seguridad nacional de la 232”, recordó.
El gobierno mexicano envió una misión de altos funcionarios para establecer negociaciones con el gobierno estadounidense, mientras que el presidente López Obrador ha mantenido una posición conciliadora hasta el momento.
Con estas cartas, si Estados Unidos convoca, una vez más, el concepto de seguridad nacional, una de ellas, la cual entró en vigor cuando se firmó el tratado en noviembre del año pasado, los aranceles no aplicarían al sector automotriz.
“Hay otra carta paralela que es más desconocida” que señala que una medida arancelaria no entraría en vigor de inmediato para México y Canadá, dando un plazo de 60 días para buscar una solución.
El panorama se ha acomodado para que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y su equipo se consoliden “como los primeros estadistas a nivel global en enfrentar a Trump con una medida seria de política económica, que lo que busca es la cooperación y la hermandad entre todos los pueblos”, consideró Molano, director general del Imco.
“Vamos a ir a la Organización Mundial de Comercio y vamos a anunciar que hay arancel cero para todos los países del mundo”, con excepciones a productos peligrosos, químicos o armas, entre otros, sostuvo.
Iniciar un intercambio de aranceles no es viable, pues sería “una guerra de nunca acabar”, agregó.
“Tenemos que integrar nuestra oferta exportable con otros países del mundo”, subrayó Molano, quien agregó que es posible adquirir insumos de países como China e India para luego exportar a Estados Unidos a precios bajos. “De esa manera podemos pelear contra el proteccionismo de Donald Trump”.
Aunque México tiene en la distancia una ventaja comparativa con Estados Unidos, tener una relación comercial con China traería “un beneficio enorme, pues son súper eficientes produciendo montones de componentes que, probablemente, nos permitirían entrar al mercado americano y europeo con costos mucho más bajos”, indicó.
¿Qué pasa con el T-MEC?
Una medida como la imposición de aranceles, si bien no pone en riesgo la ratificación del T-MEC, sí haría ruido en el proceso de ratificación, el cual inició esta semana en los tres países miembros del acuerdo comercial.
“Algo de esta naturaleza, en término de aranceles, definitivamente contaminaría el proceso” en México, Estados Unidos y Canadá, sostuvo Smith.
Sería “absurdo” aprobar un tratado en un país, si se sabe que los socios comerciales no lo van a hacer, agregó.
Para Moisés Kalach esta amenaza arancelaria “le mete ruido” a la ratificación, pero “no creo que se vaya a detener, sino va a ser parte de una negociación más grande, donde, sin duda, hay un tema político en Estados Unidos” donde destaca la elección de 2020, las diferencias con los demócratas y el informe de Robert Mueller sobre la supuesta trama rusa, dijo.
*Tomado de Expansión