ESPECIAL: Farma avanza en la cura del cáncer de mama
Mueren dos mujeres cada hora por cáncer de mama, un mal que lejos de disminuir su efecto letal en la población femenina mexicana, se ha incrementado 28% en los últimos seis años, según datos de la Secretaría de Salud (Ssa). Sin embargo, con un diagnóstico a tiempo y un tratamiento biotecnológico, las historias de mujeres que padecen esta enfermedad podrían ser diferentes.
La biotecnología representa hoy un paso importante para el tratamiento de éste y otros tipos de cáncer, pues mejora la calidad y representa una oportunidad ‘real’ de recuperación para las personas afectadas por esta enfermedad, dijo Rodrigo Muñoz, Director Asociado de la Carrera de Biotecnología del Tecnológico de Monterrey, quien estimó que entre 70% y 80% de los casos que se detecten a tiempo y se traten adecuadamente pueden superar la enfermedad exitosamente.
A diferencia de los fármacos ‘tradicionales’, que tienen efecto en todo el cuerpo, los biotecnológicos son medicamentos diseñados para enfocarse en un blanco terapéutico. Funcionan para lo que fueron desarrollados y no para otra cosa. Eso hace que sean más eficaces y menos agresivos que una quimioterapia, explicó Irma Egoavil, responsable del área de cáncer de mama para Roche.
La farmacéutica suiza es una de las que cuentan con una alternativa biotecnológica para el tratamiento del cáncer de mama, un mal que cobra la vida de más de 5 mil mujeres mexicanas cada año. PharmADN (Argentina), Amgen (Estados Unidos), así como Pfizer (Estados Unidos) en asociación con Verastem, son otras firmas que tienen líneas de investigación en materia biotecnológica para la cura de este padecimiento.
A nivel mundial hay entre 200 y 300 tratamientos biotecnológicos, para curar el cáncer de mama, en las primeras fases de investigación, los cuales podrían tardar hasta 15 años en comercializarse. En el país, Muñoz calculó que ya hay alrededor de 20 medicamentos disponibles.
Roche, por ejemplo, cuenta con un tratamiento biotecnológico para tratar el cáncer de mama tipo HER-2 positivo, que afecta a 25% de las mujeres que presentan esta enfermedad. La farmacéutica suiza invirtió entre ocho y 12 años de investigación, 1,000 millones de dólares (mdd) y alrededor de 7,000 estudios clínicos para desarrollar un anticuerpo monoclonal para combatir la proteína HER-2.
En condiciones normales, este prótido tiene la función de promover el crecimiento de las glándu las mamarias, sin embargo, cuando las células cancerosas exceden los niveles ‘normales’ de HER-2, resultan mucho más agresivas y letales, pues crecen y se reproducen con rapidez.
Los retos
Si bien los biotecnológicos son una esperanza para los 14,000 casos de cáncer de mama que se detectan cada año en el país, los aún elevados costos de los tratamientos (hasta 100 veces más caros que una quimioterapia) son una limitante, consideró Guillermo Carrasco, coordinador académico de la Concentración en Gestión Farmacéutica del Tecnológico de Monterrey.
La llegada de los biocomparables podría ayudar a ‘presionar’ los precios de los tratamientos de patente y hacerlos más accesibles a la población mexicana. También se pueden incorporar las alternativas biotecnológicas en los cuadros básicos del sector salud para ampliar la disponibilidad de los tratamientos, coincidieron loes especialistas.