Innovación eco-tópica en la BUAP
David Juárez Estrada, egresado de Ingeniería Textil de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) propone fabricar vendas para uso médico usando un activo antimicrobiano a base de ajo que atacarían las bacterias e impedirían su reproducción.
Indicó que a través de su proyecto de tesis “Apresto antimicrobiano de origen orgánico base allium sativum”, fue que investigó un principio activo de origen natural para aplicarlo en telas y combatir hongos, en especial el candida albicans.
David Juárez explicó que actualmente existen sustancias químicas que evitan la acumulación de microbios en tejidos, tal es el caso de nanopartículas de plata y cobre, así como derivados de sales yodadas, sin embargo, existen pocos activos antimicrobianos de origen orgánico.
Explicó que su proyecto fue fusionar la ecología con la industria textil, asimismo darle una mejor presentación y uso a distintas prendas para un sector en específico, en este caso el médico.
Juárez Estrada explicó, que en la búsqueda por encontrar el activo de origen natural adecuado, observó plantas medicinales como boldo y árnica, pero optó por el ajo el cual se utiliza en el tratamiento de infecciones bacterianas y de hongos.
Señaló que al investigar la actividad microbiana del ajo, llevó a cabo diferentes pruebas para encontrar el principio activo y más tarde estudió los diferentes métodos de su extracción, donde seleccionó el de extracción continua.
El proceso
El egresado de Ingeniería Textil de la BUAP indicó, que por medio de aprestos y acabados logró formar una sustancia que aplicó a una tela cien por ciento de algodón.
Añadió que en un antibiograma, prueba microbiológica para determinar la sensibilidad o resistencia de una bacteria a un grupo de antibióticos, el resultado fue satisfactorio, ya que se inhibió el crecimiento de hongos alrededor de la tela.
La BUAP en un comunicado señala que durante todo el proceso contó con la asesoría del químico fármaco-biólogo y académico de la Escuela de Biología, Guillermo Rueda Luna, además de Lidia Pulido Solís, académica del Colegio de Ingeniería Textil.
Resaltó que el agente activo permanece en la tela durante un mes, sin efectos secundarios en cuanto a olor y color, mismos que se eliminaron con un lavado técnico, por lo que, el lienzo conservó sus propiedades.
Adelantó que pretende patentar esta idea con el objetivo de ser utilizada en el área de la salud y así atacar diversos tipos de padecimientos, además de buscar otros campos de aplicación de dicho activo antimicrobiano de origen natural.