Los resultados de las ventas automotrices en Estados Unidos siguen mostrando crecimiento para las principales marcas automotrices en comparación con el mes de julio de 2013, encabezados por Chrysler que reporta un 20% de crecimiento principalmente por las ventas de sus unidades de la marca Jeep y la buena aceptación de su modelo Chrysler 200.
También reportan crecimientos Toyota (12%), Nissan (11%), Ford (10%) e inclusive GM en medio de sus llamados a revisión, quien reporta un avance de 9%.
Los analistas siguen pronosticando un mercado que superará los 16 millones de unidades este año y probablemente logren superar los 16.6 millones de unidades alcanzados en 2006, ventas que registran el récord para un año calendario para nuestro vecino del norte. Estos resultados seguramente mantendrán un fuerte crecimiento en nuestras exportaciones, ya que como todos sabemos el principal destino de las exportaciones automotrices es, principalmente, EU. Probablemente esto ayudará a mitigar los efectos negativos que se comenzarán a sentir por la caída de Argentina debido a la moratoria de pagos, que podría arrastrar a la baja a otros países que son destino de nuestras manufacturas automotrices en la parte sur de nuestro continente.
Hay un indicador que debemos mantener bajo la lupa y es el de los incentivos otorgados por las armadoras en EU que reporta un promedio de 2,731 dólares por unidad vendida y que es 7% más elevado que el mismo mes del año anterior; sin embargo, está muy por debajo de los 3,458 dólares ofrecidos en incentivo por Chrysler en promedio o de los 3,400 dólares promedio ofrecidos por Ford y GM, lo que muestra un crecimiento del alrededor de 13% contra julio de 2013, según reporta TrueCar y retoma Automotive News.
Este indicador puede seguir presionando a la alza a las otras armadoras para generar mayores incentivos, lo cual hemos visto antes y es un indicador muy negativo, ya que genera diversos efectos en el mediano plazo que podrían ser dañinos y que a la larga provocarán una caída prematura de las ventas, ya que por un lado se motiva a adelantar compras, y por el otro lado daña las utilidades de las empresas que podrían verse involucradas en una carrera de incentivos que siempre es ascendente y más dañina.
Si a lo anterior le sumamos que es un año en el que la economía de EU tiene buenas expectativas, entonces los incentivos están alimentando ventas por encima de los niveles que de por sí deberían ser buenas, lo que genera una aceleración de ventas por encima de la realidad económica, lo que puede tener un rebote aún más agresivo a la baja una vez que la economía comience a desacelerarse.
Parece que las empresas americanas no aprendieron de la crisis de 2009 y comienzan a cometer los mismos errores que llevaron a dos de las tres grandes a tener serios problemas económicos que las precipitaron hasta acudir al Capítulo 11 de bancarrota cómo único recurso para salir adelante.
Esperemos que esta espiral ascendente de incentivos se detenga y que con el lanzamiento de los modelos 2015 retomen el paso correcto para que la industria no tenga efectos negativos a largo plazo. Por lo pronto veremos fuertes niveles de exportación en los próximos meses en nuestro país, esperemos que en un lapso suficiente como para mitigar el inminente impacto económico que tendremos que enfrentar por lo turbulento de la economía mundial, que comienza a complicarse por el ya mencionado default argentino y las crisis de Ucrania e Israel que han hecho retroceder prácticamente a todas las bolsas de valores en el mundo.
*Mauricio Kuri es director ejecutivo de Fondo Unido México, catedrático de RR.PP y Comunicación Estratégica del ITESM y especialista en la industria automotriz.