El año que se nos fue
El año que termina ha sido uno de retos estructurales para la industria manufacturera en el que se han conjugado varios factores que derivaron en una tormenta perfecta que ha provocado una fuerte caída de la contribución industrial al PIB.
La manufactura está pasando por horas bajas. Muy bajas. Entre febrero y marzo nos despertamos con las revueltas laborales en Tamaulipas y, de menor intensidad, en toda la frontera norte. No se está ejecutando obra pública en infraestructura productiva (aduanas, puertos, carreteras...) con la intensidad requerida para el desarrollo industrial y nos estamos perdiendo en debates muy controversiales sobre el nuevo aeropuerto y el tren maya. El T-MEC no termina por cerrar, lo que está generando una gran incertidumbre que, con suerte, no se resolverá hasta el próximo año. En cuanto a los datos de la realidad nacional: la economía está estancada en una tasa de crecimiento cero, soportada sólo por el alza del sector primario, no del secundario ni de los servicios.
Te puede interesar: Detalles del T-MEC tienen nerviosos a los empresarios mexicanos
La inversión en bienes de equipo está cayendo en tasa interanual a 9.5% y la actividad económica en el sector secundario cae a tasas de 2.5% en el primer semestre del año. Los recursos del Conacyt para fomentar el desarrollo científico y tecnológico se han reducido al extremo, cuando no se han congelado, dejando atrás proyectos clave...
Por el lado positivo, hemos visto avances (tímidos) en digitaización de operaciones; las universidades del norte del país han comenzado a crear programas formativos orientados a transformación digital y a la industria 4.0; se realizó la primera feria de Hannover en México, en Guanajuato, con gran éxito de público y no tanto avance en los temas calientes de la industria 4.0; se ha consolidado la iniciativa Nuevo León 4.0 y han comenzado a surgir iniciativas similares en otros estados como Guanajuato, Jalisco o Estado de México, fuertemente soportadas por los principales clústeres económicos... luces muy pequeñas para un año de tanta sombra.
Te puede interesar: Empresas de la industria aeroespacial ¡con el ojo en Yucatán!